Sánchez suma 43.000 viviendas más a su plan basado en promesas y no realidades

Cifras y más cifras. La pregunta es: ¿Son una realidad o son sólo precisamente eso: números? Pedro Sánchez tira de cantidades elevadas, en este caso de viviendas a "precios asequibles", para que a los ciudadanos les entren por los ojos sus medidas. Todo ello dentro de su plan de campaña para intentar salvar su merecida marcha de Moncloa.

Este fin de semana anunciaba 50.000 de estas viviendas de alquiler social de la SAREB y ahora suma otras 43.000 financiadas con una nueva línea ICO de 4.000 millones de euros. Sin embargo, de esas 50.000 iniciales, solo 9.000 están disponibles ya que otras 14.000 ya están ocupadas, 15.000 sólo son proyectos que ni siquiera han empezado a construirse y las 12.000 restantes necesitan ser rehabilitadas.

Ahora llegan esas 43.000 que, tal y como ha anunciado durante su comparecencia en la sesión de control al Gobierno, serán también tanto de nueva construcción como de rehabilitación. Por lo tanto, más de lo mismo. El líder socialista ha expresado que las condiciones serán que las viviendas cumplan con la eficiencia energética y que sean de alquiler social o cesión de uso de al menos 50 años.

"Vamos a hacer del acceso a la vivienda un derecho y no un problema porque no hay nada más constitucional que la nueva ley de vivienda y convertir vivienda en el quinto pilar estado bienestar", ha expresado un henchido Pedro Sánchez desde el atril del Congreso.

No por esperado hay que dejar de desatacar que la sesión de control al Gobierno de este miércoles, que era sobre la guerra en Ucrania, la política en Marruecos y la política europea, ha sido utilizada por Sánchez como altavoz para sus medidas, para hablar de lo que él quiere y le interesa y por supuesto para hacer campaña. Al estilo de la moción de censura, donde se explayó a gusto para defenderse de la complicada situación por la que pasa su Ejecutivo.