El CNI sigue la pista marroquí y al "amigo" del PSOE en el pucherazo de Melilla
El escándalo de la compra de votos en la ciudad autónoma no es nuevo. Como tampoco lo son los lazos de CpM y Mustafá Aberchán con Rabat. Sospechosos habituales de los servicios secretos.
CNI melilla
Si Marruecos ya estaba en el punto de mira del CNI tras el estallido del escándalo Pegasus y las sucesivas avalanchas fronterizas auspiciadas desde Rabat, los servicios de inteligencia rastrean también en estas últimas semanas la pista marroquí en el pucherazo de la compra de votos en la ciudad autónoma.
En realidad, las numerosas antenas del CNI en Melilla (los agentes desplegados sobre el terreno, en el argot de La Casa) no han dejado de tener nunca en su radar a la proislamista Coalición por Melilla y a su líder, Mustafá Abechan, un viejo conocido de los espías desde su inquietante alianza hace décadas con el GIL de Jesús Gil, alianza que aupó a Aberchán a la presidencia de Melilla. Solo duró allí un año. Un político, por cierto, con estrechos contactos históricos con el PSOE.
El escándalo de la compra de votos en la ciudad autónoma no es nuevo. Como tampoco lo son los lazos de CpM y Mustafá Aberchán con Rabat. Sospechosos habituales de nuestros servicios secretos.
La mano desestabilizadora del régimen de Mohamed VI en la ciudad melillense es constante y permanente en una plaza estratégica para la defensa nacional. De hecho a la Comandancia Militar de Melilla es un centro de operaciones vital en aquella frontera.
Zapatero y José Blanco, entonces secretario general y número dos del PSOE, en la firma de un pacto con Aberchán.
Que Rabat ha alimentado a los sectores promarroquís en estos últimos años lo confirman a ESdiario fuentes del CNI. Ciudadanos ha exigido explicaciones en el Congreso sobre el papel ds Marruecos. Curiosamente, su presidente al arrancar la legislatura fue uno de los suyos, Eduardo de Castro.
En ese avispero de inestabilidad desde que el popular Juan José Imbroda perdió la presidencia, el CNI rastrea la larga mano de los servicios secretos de Mohamed VI. Una vez más con Pedro Sánchez silente y mirando a otro lado.
Vox apunta directamente a Marruecos
Quien si apunta directamente a la mano de Marruecos es Vox. Su candidata a la Presidencia de la Comunidad de Madrid, Rocío Monasterio, ha señalado a Rabat en los presuntos casos de compra de votos que investiga la Justicia en diversos puntos de a geografía española, entre ellos Melilla, de cara a los comicios autonómicos y municipales del próximo 28 de mayo, y ha llamado a "reflexionar sobre lo que está pasando".
Durante una visita al barrio madrileño de Lavapiés en este antepenúltimo día de campaña, Monasterio ha recordado que fue su partido el primero en denunciar lo que estaba ocurriendo en Melilla y ha advertido de que "detrás está Marruecos".
Rabat niega injerencias
Por su parte, Marruecos ha salido al paso de los señalamientos de que podría estar detrás de la compra de votos por correo en Melilla, que ha atribuido al "contexto" electoral en que se producen, al tiempo que ha recalcado la buena relación existente actualmente con España.
En rueda de prensa, el portavoz del Gobierno, Mustafá Baitas, ha subrayado que las acusaciones contra el reino alauí se producen en un "contexto conocido" como son las elecciones en la ciudad autónoma.
Así las cosas, ha negado cualquier injerencia en asuntos internos españoles. "El Gobierno de Marruecos no puede interferir", ha sostenido Baitas, que ha aprovechado para poner en valor la buena relación entre ambos gobiernos.