Arrimadas abandona el barco antes de hundirse: deja Ciudadanos... y la política

"Después de dedicar los mejores años de mi vida a mi país, no hay mayor honor que representar a los españoles en un tiempo tan determinante. Hoy no puedo resumir todo lo que ha aprendido, vivido, sufrido o disfrutado, pero hay una palabra que resume todo lo que siento: gracias", ha sido una de las frases iniciales de Inés Arrimadas en su rueda de prensa para anunciar que deja Ciudadanos y la política.

La que fuera uno de los pesos pesados de Ciudadanos ha decidido bajarse del barco y dejar a la tripulación a escasos metros de la colisión contra las rocas. Ha defendido la decisión del que hasta ahora era su partido de no concurrir a las próximas elecciones generales, ya que considera que "es una decisión difícil pero la más responsable para España y para el espacio de centro del país".

Durante su discurso, también ha tenido palabras de agradecimiento al ex máximo dirigente de Ciudadanos, Albert Rivera, al que ha agradecido la oportunidad que le dio de formar parte de un proyecto en el que siempre ha creído.

Arrimadas ha dedicado una importante parte de su discurso a su etapa en Cataluña, donde inició su carrera política y donde asegura que hicieron historia frenando al nacionalismo: "Levantamos la voz, rompimos el silencio, e hicimos frente al régimen nacionalista y demostramos que la mejor manera era sin complejos". En su mensaje también ha tenido una mención especial a los catalanes, a los que ha agradecido que acudieran con valentía a las urnas para frenar "el golpe de estado de 2017".

Como era de esperar, no ha hecho referencia a los rumores que la situaban en el Partido Popular. Un PP que, no obstante, negaba los contactos con Arrimadas. Sin embargo, Arrimadas ha acabado su comparecencia deseando suerte a los gobernantes que ganen las elecciones del próximo 23 de julio porque "España y los españoles se lo merecen".

Arrimadas y el camino que le ha llevado a abandonar Ciudadanos

Son muchos los rumores que rodean a Ciudadanos estos días después de otro descalabro más en las urnas. Las elecciones generales de 2019, en las que pasaron de 57 escaños a 10 en el Congreso, significó el principio de la caída en picado de un partido que visto lo visto parece lejos de recuperarse. Estos malos resultados acabaron con la marcha de Albert Rivera y con la convocatoria de primarias para conocer a su nuevo presidente. Fue presidenta en este caso, Inés Arrimadas, que derrotó a Francisco Igea.

Desde entonces, la política de origen andaluz fue la cara visible de un proyecto que llegó para acabar con el bipartidismo pero que se tuvo que ir adaptando a las circunstancias. No tuvo éxito en su misión e intentaron salvar el barco con una refundación que incluso ha empeorado las cosas.

La vicealcaldesa de Madrid, Begoña Villacís, y la portavoz de CS en el Congreso de los Diputados, Inés Arrimadas

Inés Arrimadas, la presidenta en la sombra de Ciudadanos

Arrimadas, aunque siguió siendo una de las caras visibles de los naranjas como portavoz en el Congreso, dio un supuesto paso atrás dentro de la formación, aunque no son pocas las voces que la etiquetaban de “presidenta en la sombra”.

Sin ir más lejos lo ha hecho su ya excompañero y ahora enemigo Edmundo Bal, que tras la decisión de Ciudadanos de no presentarse a las elecciones generales estalló ante las cámaras de televisión, contra la dirección y contra Arrimadas. No era santo de su devoción y ahora lo era mucho menos tras esta “traición” y acto de cobardía, según el propio Bal, que apuntó directamente a Arrimadas de estar detrás de la decisión.

Pues bien, tan solo 48 horas después de este anuncio, la portavoz de los naranjas en el Congreso anuncia su marcha del partido y también de la política. Finalmente no irá en las listas del PP, algo que sonaba con fuerza en los medios de comunicación y en el mundo político de nuestro país a pesar de que ella había repetido por activa y por pasiva que era Ciudadanos o nada más.