Los dos besos de Sánchez a Delcy reavivan los interrogantes del "caso Ábalos"
El presidente rompe el protocolo para besar a la vicepresidenta de Maduro, ante la sorpresa de Von der Leyen y Charles Michel. Y devuelve a la actualidad el escándalo de Barajas sin aclarar.
El último beso de Pedro Sánchez que puede hacer temblar su campaña, y sus relaciones con Europa, a sólo cinco días de la cita con las urnas. En la cumbre de Europa con Latinoamérica, el régimen de Venezuela de Nicolás Maduro ha decidido enviar a una de sus figuras más controvertidas: la vicepresidenta Delcy Rodríguez, con entrada prohibida en la Unión Europea por violar los derechos humanos, pero esto no ha sido problema para que Sánchez rompa el protocolo y la salude con efusividad con dos besos, dejando al resto de asistentes atónitos
En concreto, a su llegada a la sede del Consejo de la Unión Europea, la vicepresidenta de Venezuela, Delcy Rodríguez -que puede ser detenida- fue recibida con un apretón de manos por parte de Úrsula Von der Leyen y de Charles Michel, pero el presidente español y de turno de la UE ha roto la cadena y se ha acercado a besarle en ambas mejillas.
Delcy Rodríguez no es una desconocida para el Gobierno de Pedro Sánchez. Le generó grandes quebraderos de cabeza cuando se descubrió su reunión secreta con el entonces ministro José Luis Ábalos en el aeropuerto de Barajas donde al parecer la vicepresidenta chavista de Venezuela, que no puede pisar suelo europeo, se saltó esta norma y descargó unas maletas que podían contener oro o dinero procedente de Venezuela.