María Guardiola ya es presidenta de Extremadura con el mandato de “trabajar”

María Guardiola ha tomado posesión como presidenta de la Junta de Extremadura en el Museo Nacional de Arte Romano de Mérida, como la primera mujer que preside el gobierno de Extremadura, en el mismo emplazamiento elegido por el también popular José Antonio Monago en julio de 2011 cuando ocupó este cargo, el único del PP en ostentarlo en una región de tradición socialista.

María Guardiola ha insistido mucho en la idea del “trabajo”, “ya solo toca trabajar, trabajar y trabajar”, ha insistido, y ha indicado una frase con mucho sentido tras días amargos antes de alcanzar la presidencia: “a veces las lágrimas pesan más que las palabras” ha citado, para asegurar que no va a llorar, pero la emoción la embarga.

María Guardiola ha indicado que “vamos a sacar a Extremadura de su posición habitual en la cola de los ranking y aspiramos a una política madura y sensata”, en ese extremadurismo que encarna, remarcando el aspecto social en que “no vamos a aplazar lo urgente ni desatender a las familias, porque creemos que esta región crezca”.

Su antecesor en el cargo, el socialista Guillermo Fernández Vara, ha sido cortés y le ha entregado a María Guardiola las llaves de la residencia oficial de la presidenta de la Junta en Mérida, y ha alabado la alternancia política: “la democracia recibe con agrado lo que es consecuencia de la democracia”.