Page baja de la nube al PSOE y clama por entregar el mando a Puigdemont
El presidente de Castilla La Mancha se convierte en la única voz discordante con los planes de Sánchez y evidencia que la negociación con los independistas les tiene "muy preocupados".
El PSOE de Sánchez ha recibido el apoyo que le faltaba del partido independentista catalán Junts de Carles Puigdemont para controlar la Mesa del Congreso y en la filas socialista se mantiene la sonrisa a pesar de las negociaciones y las prebendas que tendrá que ofrecer Sánchez para ser investido presidente. Sólo se ha producido una salida del guión marcado por el PSOE: la del presidente de Castilla La Mancha, Emiliano García-Page.
La voz discordante con Sánchez aparece en una jornada clave para saber como discurrirá la nueva legislatura y para Page, ahora que comienza "la negociación de la investidura" para el Gobierno central, ha señalado que: "Puigdemont, que es el que tiene el mando a distancia de la legislatura y desde fuera de España, no puede tener sometido a libertad condicional al Gobierno de España y mucho menos lo que no puede ser es que el que decida".
En opinión del presidente de Castilla-La Mancha hay dos vías: o Puigdemont "se apea del referéndum y del proceso de 'Brexit' catalán o la legislatura va a ser complicada o no va a empezar. "Pero es una opinión personal de alguien que no tiene la más mínima información", ha añadido.
Page asegura que están "muy preocupados"
En referencia a las negociaciones de Sánchez con los independentistas, Page ha declarado desde Pamplona, donde ha acudido a la toma de posesión de María Chivite como presidenta de Navarra, que "está empezando la feria o el mercado". Unas declaraciones que se producen tras la elección como presidenta de la Mesa del Congreso Francina Armengol, con 178 votos (PSOE, Sumar, PNV, ERC, Junts, Bildu y BNG).
Lo último que podían estar imaginando a la hora de votar es que esta legislatura fuera con mando a distancia, y tan a distancia está el mando que está fuera de España.
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A su juicio, "eso es lo controvertido, lo perverso del resultado diabólico que arrojaron las urnas". "La votación del Congreso no deja de ser el trámite para que se dé comienzo a las negociaciones y eso nos tiene a todos en vilo, por no decir muy preocupados", ha señalado.