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Hamás recaudó 500 millones con negocios inmobiliarios en países islámicos

Gobiernos musulmanes que hoy piden contención a Israel (Turquía, Arabia, Egipto, Emiratos, Argelia…) han tolerado décadas las sociedades inversoras del grupo terrorista.

El presidente turco Erdogan junto al líder de Hamas, Ismael Hanijah.

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30 empresas llevan décadas financiando a Hamás con lujosos negocios inmobiliarios desarrollados con todos los parabienes oficiales en países islámicos supuestamente moderados que hoy piden contención a Israel: Turquía, Egipto, Arabia Saudita, Emiratos Árabes Unidos, Argelia o Sudán.

Superan los 500 millones de dólares. Más las ayudas que recibe su administración en Gaza (hospitales, escuelas, subsidios, funcionarios). Ahí entran 500 millones de dólares de Qatar, 1.200 millones de euros de la UE, 500 millones de dólares anuales de la ONU. Más falsas fundaciones filantrópicas ya destapadas con sede en occidente.

Controlar ayudas en un país que gobierna una banda terrorista es imposible. Hamás tiraniza Gaza sin elecciones mientras hostiga a Israel. Gaza agoniza, pero al amo le sobran cohetes. Y enfrenta occidente con oriente cuando Putin lo precisa. No puede ganar a Israel, pero sí aglutinar odio contra UE y EEUU, aliados de Ucrania. Cuanto peor Gaza (por hambre o bombas), mejor para Hamás. Su banda y gobierno. Véase la red de Hamás S.A.

Autopista construida por una firma de Hamás.

A.H. Opera con seis filiales en Egipto y Sudán. Logró un contrato de 43 años para la construcción y gestión de la autopista Dongola-Argeen de 362 km en el norte de Sudán (parte de la ruta El Cairo-Ciudad del Cabo, una de las tres principales africanas). Más una zona libre de 50 kilómetros cuadrados en la frontera entre Egipto y Sudán, una concesión minera, un proyecto de matadero y cuarentena de ganado y 5.400 millones de metros cuadrados para proyectos de recuperación de tierras y agronegocios.

El grupo terrorista, sólo por venta de acciones, ingresó 15 millones de dólares. Turquía destapó en julio pasado a los espías israelíes que investigaban al ceo local de Hamás, al que regaló nacionalidad turca. Días después, Erdogan recibió al líder de Hamás, Ismail Haniyeh, el Josu Ternera de Gaza.

Tiene la oficina central en El Cairo con un pequeño equipo en Egipto y Sudán. Ofrece oportunidades de oro en Nuevo Cairo. “Puedes reservar tu unidad con un depósito que empieza en 200.000 libras por metro cuadrado”. Integra un holding, Z.G, con intereses en petróleo, hostelería, y construcción civil.

Hamás opera como inmobiliaria en Egipto.

A.R. También opera en Egipto. Es una de las principales inmobiliarias en Hurghada, centro turístico de lujo. “Hemos enriquecido el mercado inmobiliario en Hurghada con más de treinta proyectos, que se han implementado y entregado en su totalidad”. Son “viviendas caracterizadas por un lujo ilimitado”. También tiene negocios inmobiliarios en El Cairo, Jartúm (Sudán) y Riad (Arabia Saudí).

Controlar ayudas en un país que gobierna una banda terrorista es imposible. Hamás tiraniza Gaza sin elecciones mientras hostiga a Israel. Gaza agoniza, pero al amo le sobran cohetes. Y enfrenta occidente con oriente cuando Putin lo precisa.

T.G. Creció en Turquía con diez filiales desde 2007 como consultor inmobiliario: “la construcción o desarrollo de inmuebles en áreas como casas, hoteles, residencias y edificios universitarios”. “Trabajamos para dar el mejor servicio a nuestros clientes tanto nacionales como extranjeros”. Entró en la bolsa turca, pero sólo el 30 % de sus acciones se han emitido. El 70 % permanecen en manos de Hamás.

Turquía, otro escenario inmobiliario de Hamás.

El grupo terrorista, sólo por venta de acciones, ingresó 15 millones de dólares. Turquía destapó en julio pasado a los espías israelíes que investigaban al ceo local de Hamás, al que regaló nacionalidad turca. Días después, Erdogan recibió al líder de Hamás, Ismail Haniyeh, el Josu Ternera de Gaza.

Ismail Haniyeh, líder de Hamas, agasajado por el presidente de Turquía, Erdogan.

A.C. Está ubicada en Arabia Saudita. Industria hotelera, consultores de inversiones, invernaderos, contratación de edificios, desarrollo inmobiliario. Tiene especialistas en negocio del sector público y privado. Tiene sede en Jeddah. “Desde donde atendemos a nuestros clientes a nivel local y regional”.

Lejos de la clandestinidad. “En la última entrevista en el primer canal saudita en el programa SBC Studio, discutimos el tema del emprendimiento y el desarrollo empresarial”.

I.R.E. Opera en el sector inmobiliario con varias filiales. Tiene sede en Riad, Arabia. Pero también opera en los Emiratos. Es líder en subastas y comercialización de bienes raíces en el Arabia. Ofrece veinte “propiedades distintivas superando un valor de dos mil millones de riales. Terrenos, granjas, hoteles, centros comerciales y edificios con todos los servicios en ubicaciones distintivas”. Sólo en Riad posee 410.600 metros cuadrados. Y vende terrenos junto a la mezquita del profeta en La Meca. Asisten príncipes a sus inauguraciones.

Arabia, otro destacado foco inversor inmobiliario de Hamás.

Su CEO piropea en 2021 por videoconferencia al heredero saudí: “Habló en el lenguaje de los números, con total claridad y transparencia, y esto encarna el camino correcto y exitoso que sigue nuestro país para el avance y la prosperidad”. El mismo príncipe que telefonea a Putin tras comprar Telefónica. El empresario salió feliz: “la reunión es el comienzo del trabajo para continuar los proyectos y objetivos para lograr sus metas generales, que se centran en diversificar las fuentes económicas en un país que es la arteria de la economía global”.

S.I.C.H. Inmobiliaria. Opera en Argelia desde 1998, con diversas filiales. Tiene oficinas en Argel. “Propiedad de inversores árabes, ya ha llevado a cabo varios proyectos, como el centro comercial Al-Quds en Chéraga (Argel), complejos inmobiliarios y centros comerciales en la capital. Es propiedad de once empresarios (sauditas, palestinos y jordanos)”.

La sede se encuentra en Jeddah, Arabia Saudita. Su valor se estima en 150 millones de dólares. Argelia lo toleró mientras mantenía cordiales relaciones con España (caso Ghali), Francia o Italia.