Melilla da ejemplo al mundo de paz y convivencia y rebaja la tensión generada
Los líderes religiosos protagonizan una ejemplar fotografía tras los incidentes en la sinagoga y la detención del mayor reclutador yihadista de Europa en la ciudad este mismo lunes.
La fotografía que han protagonizado los representantes de las cuatro principales religiones que conviven en la ciudad de Melilla: cristiana, musulmana, hindú y judía, debería dar ejemplo al mundo de unidad. La imagen nace de un acto organizado por la Comunidad Autónoma que se celebró en la tarde-noche del lunes, con el propósito de mantener su apuesta decidida "por la convivencia pacífica" y "rogar por la paz en el mundo".
Pero el encuentro tiene un simbolismo aún más profundo para Melilla, ya que ha sido una semana convulsa en la ciudad. Concretamente, hace cuatro días se produjeron incidentes frente a la sinagoga principal de la ciudad por un grupo de participantes de una protesta pro Palestina. Este mismo lunes también se ha producido una noticia alarmante: se ha detenido al considerado el mayor reclutador yihadista de Europa, el belga convertido al islam Mustafa Maya Amaya.
La cita, que estaba programada con anterioridad a lo ocurrido, rebaja la tensión en Melilla y sirve para "preservar la convivencia que reina en la ciudad desde siempre", han querido demostrar máxima unidad en este acto que ha contado con la intervención inicial del vicario episcopal de Melilla, Eduardo Resa, y los presidentes de la Comisión Islámica de Melilla, Farid Abdel-Lah, y un imán de mezquita; de la Comunidad Hebrea, Mordejay Guahnich y el rabino principal y de la Hindú, Ramesh Ramchand.
Melilla da una lección de convivencia
Por su parte, el presidente de la Ciudad Autónoma, Juan José Imbroda (PP), ha destacado en su intervención que "esto que hemos hecho hoy, que no se ha hecho nunca, es un paso importantísimo para que esa paz, la nuestra interior, la de todos los melillenses, se encuentre y también es un llamamiento a Dios, que debe escuchar esa oración sincera que habéis pronunciado esta tarde aquí".
A juicio de Imbroda, Melilla "es una ciudad divina, es una ciudad bendita, tenemos las religiones importantes aquí conviviendo todos los días, con respeto por las distintas culturas y ello debe de prevalecer siempre, el diálogo sobre enfrentamiento y la justicia contra la injusticia, porque así encontraremos la paz".
La detención hace saltar las alarmas
El acto estaba programado desde antes de que se iniciara el nuevo conflicto entre Israel y Hamás el 7 de octubre a raíz de los atentados del grupo terrorista. Pero, además, ha querido la coincidencia que llegue para calmar los caldeados ánimos tras el ataque a la sinagoga de la ciudad y justo el día de una operación antiyihadista que se ha saldado de momento con la detención de uno de los mayores reclutadores de Europa de combatientes para el Estado Islámico y Al Qaeda.
Se trata de Mustafá Maya Amaya, un converso español de origen belga, que fue condenado en 2018 a ocho años de prisión por liderar una red radicada en la ciudad autónoma que reclutó a decenas terroristas para hacer la Yihad en el extranjero.
El yihadista estaba en libertad desde hacía aproximadamente un año y este lunes ha sido detenido de nuevo por la Policía Nacional en Melilla, en una operación que sigue abierta.