La 'cara B' de la jura de Leonor: Sánchez y Armengol empañan la celebración

La Princesa Leonor ya se ha convertido en la Regente. La heredera de la Corona, ante las Cortes y coincidiendo con el alcance de la mayoría de edad, ha jurado la Constitución Española y lealtad al Rey Felipe VI en un solemne acto en el Congreso de los Diputados. Así, tal y como explica a ESdiario Daniel Berzosa, jurista y profesor de Derecho Constitucional, la Princesa de Asturias "siendo la heredera de la Corona desde que su padre fue proclamado Rey", será la responsable ahora de asumir la Jefatura del Estado, bien temporal o permanentemente, en caso de que Felipe VI se vuelva incapaz de proseguir con su responsabilidad -ante una enfermedad, por ejemplo- o tras la abdicación o muerte del actual Rey de España. Hasta ahora, recuerda el profesor de Derecho Constitucional consultado, la Regencia "la debería de asumir la Reina Letizia".

Además, se trata de un acto solemne con una muy notable relevancia histórica. La Princesa Leonor se ha sometido a "un juramento que tiene un nivel transcendente con lo que acata", resalta Daniel Berzosa a este periódico. Y, además, "lo hará ante la representación del pueblo español, ante la representación de España".

Pero más allá de este acontecimiento que marca la Historia de España, dos hechos han destacado en lo que debiera de ser un protocolar y ceremonioso acto.

Sin público a los alrededores del Congreso, por orden de Sánchez

"Hoy es el día de Leonor", repetían por doquier los diputados del PSOE al ser preguntados por la reunión entre el número tres del PSOE y el fugado de la justicia Carles Puigdemont. Y aunque el actual Gobierno de España en funciones no quería que ninguna polémica socialista destacara sobre la jura constitucional de la Princesa de Asturias, una evidente realidad se convirtió en la comidilla del día desde primera hora de la mañana.

"Casa Real sí permitía que el público se dispusiera en las inmediaciones del Congreso, no lo veían un problema de seguridad, fue Presidencia [del Gobierno de España] quien situó el perímetro de seguridad más allá de Neptuno y más allá de Cedaceros", confirma a ESdiario una fuente policial.

Es decir, por orden de Pedro Sánchez no se podía ver -literalmente- a ninguna persona de público para arropar la llegada de los Reyes y sus Altezas al acto de jura constitucional de la Princesa de Asturias en el Congreso. "Pedro Sánchez quería impedir que le abuchearan a la llegada del Congreso como ya lo intentó el pasado en la celebración del pasado 12 de octubre", valora una solvente fuente del PP a este periódico.

Los únicos que pudieron ver la llegada del Rey Felipe VI, la Reina Letizia, la Princesa Leonor y la Infanta Sofía son aquellos que tuvieron la oportunidad de asomarse a los balcones de las viviendas y los hoteles de los alrededores de la Cámara Baja. Tanto es así, que algunas de las personas que salieron a la balconada gritaron "¡Viva España! ¡Viva el Rey!" y tanto el Rey Felipe VI como la Reina Letizia saludaron sonrientemente, tal y como presenció este periódico.