A Armengol se le "olvida" que preside el Congreso y ataca al gobierno balear
La política rompe la norma no escrita de que quien lidera la Cámara Baja se aparta de actos de partido y se le calienta la lengua en la fiesta de Navidad de los socialistas mallorquines.
Ya su nombramiento fue polémico. La candidatura propuesta por Pedro Sánchez para presidir el Congreso de los Diputados fue un término más en la negociación que el líder socialista emprendió con los independentistas catalanes en cuanto se celebraron las elecciones generales el pasado 23 de julio.
Francina Armengol, tercera autoridad del Estado, fue elegida presidenta del Congreso en la primera demostración de fuerza de la izquierda, prólogo de lo que meses más tarde sería la reelección de Sánchez como presidente del Gobierno por segunda legislatura consecutiva.
Desde el principio de su mandato se ha podido comprobar que la imparcialidad de la expresidenta de Baleares en la Cámara Baja brilla por su ausencia y las críticas de la oposición por este comportamiento se suceden una tras otra.
Existe una norma no escrita en la política española que defiende que mientras un político ostenta el cargo de presidente del Congreso de los Diputados se cuida, en unas ocasiones más que en otras, eso sí, de aparecer en actos del partido al que representa, ya que se entiende que el importantísimo cargo que ostenta está por encima de todo.
Pues bien, a poca gente le sorprenderá que Francina Armengol se haya saltado esa condición a las primeras de cambio. Y es que ha sido viajar a su Mallorca natal para, en el fragor de la cena de Navidad de la Federación Socialista de Mallorca (FSM), arremeter contra el Govern de Baleares y su actual presidenta, la política del Partido Popular Marga Prohens.
Así, Armengol, ha criticado, en dicho contexto, que "el cambio de Prohens era entregarse a los postulados de Vox", y ha asegurado que no permitirán "que los gobiernos de la derecha manipulen la educación, hagan sufrir a las mujeres y niños, y pongan en peligro la paz social".
Críticas de Armengol al gobierno de Prohens
La política socialista relacionó el efecto "de la destrucción propiciada por la derecha extrema y la extrema derecha" en Baleares con el conflicto lingüístico en las aulas, "propiciado por la segregación como moneda política de cambio y sumisión del PP ante Vox". "Quieren separar a nuestros hijos de las aulas, complicar la vida de los docentes, que son lo mejor que tenemos; no dejaremos que nos manipulen una vez más", insistió la secretaria general del PSOE en Baleares, pero también presidenta del Congreso de los Diputados.
Armengol concluyó su intervención instando a todos los socialistas a "trabajar con fuerza para luchar contra esta involución". "Estamos para defender a la gente. No tendrán coraje ni fuerza de tirar hacia atrás", ensalzó Armengol, resaltando también que para este trabajo cuentan también con el Gobierno de España, que "defiende estos valores socialistas", aseguró la actual presidenta de la Cámara Baja.