El clasismo era el de ETA: la banda asesinó a una mujer que fregaba escaleras
La banda terrorista asesinó durante décadas a inocentes, entre ellos mujeres como María Luisa Sánchez Ortega, una limpiadora cuyo sueldo era además la única fuente de ingresos en su casa.
Fotograma de un reportaje de TVE emitido en 1987 con la foto de María Luisa Sánchez Ortega, la limpiadora asesinada por ETA
La ex alcaldesa de Pamplona, Cristina Ibarrola, ha sido acusada de “clasista” por decir que antes de entregar sus votos a Bildu se pondría a fregar escaleras. Lo cierto es que los amigos de Bildu, los etarras de ETA, también tienen entre sus víctimas mortales a una limpiadora a la que asesinaron hace casi 27 años. Eso sí fue un ataque a las mujeres que friegan escaleras y no la frase de Ibarrola.
Se llamaba María Luis Sánchez Ortega y trabajaba de limpiadora en Bilbao. El 18 de febrero a eso de las diez y media de la noche volvía a casa, como cada día, después de fregar quién sabe cuántas escaleras. Pasaba justo por delante de un concesionario de Renault cuando explotó una bomba que los terroristas había colocado allí.
La limpiadora de 60 años no sobrevivió a las graves heridas sufridas a consecuencia de la explosión que le amputó las dos piernas, le destrozó el pubis, le fracturó varias costillas y le produjo quemaduras en el rostro que afectaron incluso a los ojos. Aunque fue trasladada con vida al hospital de Basurto, murió horas después, en la madrugada del 19 de febrero.
María Luisa dejó un marido enfermo y dos hijos en el paro. Su trabajo era muy duro, pero digno y honrado. Tanto que el sueldo que le pagaban por fregar baños, suelos y escaleras era la única fuente de ingresos de la familia.
Este jueves quizás se haya removido un poco en la tumba y no precisamente por las palabras de Ibarrola sino por ver a los herederos políticos de sus asesinos tomar posesión del ayuntamiento de Pamplona gracias al PSOE de Pedro Sánchez.