Sánchez enseña a Page la puerta de salida y ya tiene en mente a su sucesora
El presidente ha dicho basta tras el último desaire del barón manchego. Tras la catarata de críticas de sus fieles llega ahora el plan para "liquidarle" del escenario y acabar con su etapa.
El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, y la ex alcaldesa de Toledo, Milagros Tolón.
Nunca antes como ahora, uno de esos "pellizcos de monja" de Emiliano García Page -como le llaman algunos de sus grandes odiadores del sanchismo- había provocado tan contundente y agria reacción al unísono y coordinada entre Ferraz y Moncloa.
Moncloa colocó hace unas semanas a Milagros Tolón, 'enemiga intima' de Page en el PSOE manchego como delegada del Gobierno en CLM. Toda una declaración de intenciones
Desde ya hace meses, Page ha pasado de ser el verso suelto de ese sanchismo arrollador a una pieza a batir internamente. Al que solamente le protege -como el mismo se encargó este miércoles de recordar- su mayoría absoluta en Castilla-La Mancha, el solitario salvavidas del naufragio general de Pedro Sánchez en las últimas elecciones autonómicas.
Tal es el hartazgo del presidente con Page, y sus continuos desplantes personales, que hace unas semanas Sánchez dio una paso significativo: nombrar a Milagros Tolón delegada del gobierno en Castilla- la Mancha.
Rodríguez, Page, Sánchez y Tolón: ahí se cuece la nueva gran batalla interna del PSOE.
¿Y quién es Tolón? La exalcaldesa de Toledo, miembro de la ejecutiva federal del PSOE, nombrada por el líder, y gran referente del sanchismo y de la oposición a Page en el socialismo castellano-manchego. Y haciendo tándem con la ministra Isabel Rodriguez, exalcaldesa de Puertollano y diputada por Ciudad Real, muchos socialistas han interpretado que Sánchez ha comenzado ya el plan para deshacerse del incómodo Page.
Los exabruptos de estas últimas horas desde el PSOE, Santos Cerdán, y desde el Gobierno, Óscar Puente, no hace sino apuntalar esa teoría de que como hizo antes con Susana Díaz y con Miquel Iceta, Sánchez quiere aplicar un 155 al PSOE de Castilla y La Mancha, la última aldea gala contra él.
