Las tractoradas paralizan España: el sector agrario ruge mientras Sánchez calla

El campo español se mueve a imitación de los que está ocurriendo en el resto de Europa por el hartazgo de las numerosas restricciones que se impone desde Bruselas o desde los gobiernos mientras el mundo rural muere y no dejan de entrar productos de terceros países con menores exigencias. Así, España ha vivido el primer día de tractoradas que han paralizado los accesos a las principales ciudades españoles.

Las principales asociaciones agrarias como COAG, Asaja y UPA -sin apoyo de los sindicatos CCOO y UGT- han convocado una veintena de tractoradas y la mañana ha amanecido con complicaciones en las carreteras de Valencia, Castilla y León, Castilla-La Mancha, Andalucía y Cataluña.

En Madrid, la A-42 ha quedado completamente colapsada por una columna de tractores que ha obligado a cortar el tráfico en ambas direcciones. La A-5 también se encuentra cortada en dirección Madrid. Se ha formado otra columna en la A-3 que también se dirige hacia la capital.

Los agricultores están cansados de las exigencias de Bruselas mientras productos como los de Marruecos o Sudáfrica entran en Europa sin las mismas imposiciones. Bruselas ya huele el miedo y ha anunciado que va a retirar el plan de reducir un 50% los pesticidas ante las crecientes protestas de los agricultores por toda Europa.

Asuntos como los impuestos sobre el gasóleo agrícola, el control de fitosanitarios, la gestión del estiércol, los libros digitales, la carga burocrática o dejar un 4% de la superficie en barbecho centran las reivindicaciones de los agricultores frente a la Política Agraria Común europea, la Agenda 2030 y la inacción de los gobiernos como el de Pedro Sánchez que están paralizados mientras el campo ruge.