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La "agenda paralela" de Yolanda Díaz levanta suspicacias en Moncloa y en el PSOE

El último choque frontal entre la vicepresidenta y Exteriores alimenta una polémica que viene ya de hace tiempo. Porque en el ministerio de Albares levanta ampollas su afán de protagonismo.

La vicepresidenta segunda y Ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, durante su última reunión con el Papa en el Vaticano el 2 de febrero de 2024.

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“Han sido varias y está vez el ministro se ha hartado y ha ordenado desmentirla en público, desautorizarla. Esta aseveración en ESdiario la firma un diplomático veterano destinado en zona noble del Ministerio de Asuntos Exteriores.

El que se ha hartado es su titular, José Manuel Albares. Y quien ha probado su enfado es la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz. Cierto que también vicepresidenta, pero sin competencia alguna en política exterior.

La extraña agenda paralela de Díaz lleva tiempo provocando suspicacias en el PSOE y en Moncloa. Al margen de esta polémica en el más inoportuno escenario de Oriente Medio, está la reciente audiencia con el Papa en el Vaticano que Díaz ha peleado “hasta la extenuación”, ironizan en Exteriores.

La última bronca se ha producido a cuenta del anuncio del equipo de Díaz de un viaje a Palestina desmontado al minuto por la diplomacia española responsable de coordinar los viajes del Rey, del presidente y de los ministros. “Nada se anuncia ni nada se confirma hasta que Exteriores da el ok”, remacha la fuente antes citada.

En el caso de Díaz, llueve sobre mojado. Porque su extraña agenda paralela lleva tiempo provocando suspicacias en el PSOE y en Moncloa. Al margen de esta polémica en el más inoportuno escenario de Oriente Medio, está la reciente audiencia con el Papa en el Vaticano que Díaz ha peleado “hasta la extenuación”, ironizan en Exteriores.

Yolanda Díaz y el presidente de Brasil, Luis Ignacio Lula da Silva.

Como ha peleado fotos que le interesaban como con Lula en su viaje a España o con la embajadora de Estados Unidos. Ya hace un año, Díaz decidió darse brillo internacional y se negoció una intervención ante la Asamblea General de la ONU en Nueva York aprovechando un foro sobre políticas laborales.

También ha braceado para lograr un hueco en el avión oficial para asistir a la toma de posesión se presidentes latinoamericanos afines como el colombiano Gustavo Petro o el chileno Gabriel Boric, además del citado premier de Brasil.

Nunca hasta ahora una ministra de Trabajo, ni siquiera una vicepresidenta, había buscado tal perfil exterior. Y el ministro Albares ha salido raudo a recordárselo.

Robles lanza otro toque a Díaz

Pero no solo ha sido Albares. La ministra de Defensa, Margarita Robles, ha asegurado este jueves que a ella tampoco le consta un próximo viaje de la vicepresidenta segunda a Palestina, al tiempo que ha recalcado que la política exterior la marca el presidente del Gobierno.

"No tengo ninguna constancia del viaje de la vicepresidenta, lo que si que sé es que la política exterior en España la marca el presidente del Gobierno y el ministro de Exteriores", ha zanjado Robles en declaraciones desde la sede de la OTAN donde participa en una reunión con sus homólogos aliados.

"La vicepresidenta dice que va a exponer estas cuestiones. Sin entrar en lo que dice, la posición de España es muy clara y muy rotunda", ha afirmado la responsable de Defensa después de que Exteriores asegurara que no está preparando ningún viaje a Palestina de Díaz.

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