Armengol destina 12 millones para pagar los pinganillos que impuso Puigdemont
La Mesa del Congreso convoca un concurso para los servicios de traducción, interpretación, transcripción y subtitulado en directo al castellano de las intervenciones de los diputados.
Extendido uno de los cheques a pagar a Junts por la investidura de Pedro Sánchez, la imposición del catalán en el Parlamento. La Mesa del Congreso ha convocado un concurso para la adjudicación de un contrato de servicios de traducción, interpretación, transcripción y subtitulado en directo al castellano de las intervenciones que se realicen en lenguas cooficiales en los diferentes espacios de la Cámara. El precio máximo se ha fijado en 12,5 millones de euros hasta 2027.
La Cámara Baja instaura así para los próximos cuatro años el sistema por el cual se garantizará el uso de las lenguas cooficiales y la accesibilidad a todos los diputados y asistentes con discapacidades auditivas o visuales.
Según han precisado fuentes parlamentarias, el precio máximo se ha fijado en 12.531.568,22 euros hasta 2027, si bien los pliegos contemplan que, al final, esta cantidad pudiera ser sensiblemente menor en función de la aplicación de sistemas tecnológicos que pudieran reducir las ofertas por parte de las empresas concurrentes.
Las compañías que compitan deberán ofrecer medios humanos y servicios técnicos para la prestación del servicio y el contrato se ha dividido en cuatro lotes: servicio de traducción, de interpretación, de transcripción y de subtitulado en directo. La Mesa ha aprobado este procedimiento después de su aprobación en la Junta de Contratación y en ambos casos ha salido refrendada sin votos en contra.
Además, también se ha abierto el procedimiento para la adjudicación del contrato de modernización de las salas de comisiones del Congreso con el fin de que tengan, entre otras cosas, pantallas para garantizar la accesibilidad a personas con discapacidades auditivas o visuales. En este caso, el precio máximo de licitación será de 2.109.009,90 euros.
El contrato contempla la dotación de sistemas de audio, vídeo y conferencia para garantizar la interpretación simultánea remota en las salas Constitucional, Cánovas y Sagasta, y este equipamiento sumado al subtitulado en otras cinco salas: Prim, Ernest Lluch, Herrero y Rodríguez de Miñón, Pérez Llorca y Fraga Iribarne.