Ferraz diseña una campaña europea de estigmatización a Feijóo para arrinconarle
Sánchez no quiere un 9J en clave de rendición de cuentas y busca relanzar su imagen de referente de la socialdemocracia europea contra la "derecha y ultraderecha"
La cabeza de lista del PSOE a las elecciones al Parlamento Europeo y ministra para la Transición Ecológica y Reto Demográfico, Teresa Ribera.
La vicepresidenta segunda, cabeza de lista del PSOE a las elecciones europeas del 9J y previsiblemente comisaria europea después, asomó este jueves la patita. Lo hizo al relacionar sin matices y con trazo grueso el atentado contra el primer ministro de Eslovaquia, Robert Fico, con el embrutecimiento del clima político que Teresa Ribera atribuyó, claro, a la "derecha y la ultraderecha".
"La derecha y ultraderecha deben tener particular cuidado", advirtió. Pero, lo que hizo Ribera en realidad, es anticipar los ejes de la que va a ser la campaña electoral socialista para los comicios europeos.
Sabedor de que tiene limitados -por razones obvias- los ataques directos a la líder europea de ese movimiento populista, Giorgia Meloni, la estrategia del PSOE va a ser intentar meter a Feijóo en el mismo saco que Abascal, Le Pen, Orban, el portugués Ventura o el holandés Wilders.
Poco rendimiento de cuentas de los logros de Pedro Sánchez en Europa, poco de los sucesivos varapalos de Bruselas por el reparto de los fondos Next Generation; por la amnistía; o por los ataques al Poder Judicial desde el mismo Gobierno; y mucha criminalización de PP y Vox.
Sánchez quiere recuperar su perfil de líder de la socialdemocracia europea -en su condición además de jefe de la Internacional Socialista- para volver a ejercer de muro contra lo que Moncloa llama la "fachosfera".
Sánchez ha exhibido con Meloni sintonía y gestos cordiales que le niega a Feijóo.
Sabedor de que tiene limitados -por razones obvias- los ataques directos a la líder europea de ese movimiento populista en estos momentos, la primera ministra italiana Giorgia Meloni, la estrategia va a ser intentar meter al PP y a Feijóo en el mismo saco que Santiago Abascal, Marine Le Pen, Víctor Orban, el portugués André Ventura o el holandés Geert Wilders.
Según las fuentes consultadas por ESdiario, el objetivo de los estrategas de Ferraz es doble. Por un lado, movilizar al electorado de izquierdas en unas elecciones que siempre han movido menos votantes de ese caladero a las urnas. Y por otro, entrampar de nuevo a Feijóo, empujarle al debate ideológico y no al de las propuestas y la gestión en la UE, y abrir además el campo de juego a Vox para que erosione por su derecha a los populares.