Rufián desmonta la amnistía de Sánchez: "El referéndum es la próxima parada"

"Próxima parada, el referéndum, es nuestra idea", son palabras textuales, de este mismo miércoles, del portavoz de ERC en el Congreso, Gabriel Rufián, a la pregunta formulada por ESdiario en los pasillos de la Cámara. A vísperas de la definitiva aprobación de la Ley de Amnistía, la única icónica norma que Pedro Sánchez está consiguiendo sacar adelante desde que ha revalidado la presidencia del Gobierno, el independentismo catalán tira por la borda la estrategia comunicativa del PSOE y del Gobierno.

Con mayor contundencia que nunca, Rufián ha evidenciado una palmaria realidad: el procés no está muerto. La amnesia en forma de Ley no es un punto y final. Tan siquiera un punto y aparte. La amnistía, muy al contrario, es un punto y seguido; una fase previa ya completada por ERC y Junts a cambio de la permanencia en La Moncloa de Pedro Sánchez. Es evidente.

"Hay dos millones de personas, guste más o menos, que quieren votar el estatus político de Cataluña", ha justificado Gabriel Rufián por los pasillos de la Cámara Baja. De sus palabras, al contrario de lo que dicta la consiga oficial del Gobierno, no se deduce que la "convivencia" haya florecido en Cataluña. Las exigencias y, más aún, la hoja de ruta del independentismo sigue siendo la misma: la autodeterminación. Ni más ni menos.

¿El problema? Que Pedro Sánchez, precisamente, depende de ese independentismo para que su Gobierno sobreviva. No posee, en suma, autonomía. El poder Ejecutivo no es independiente. El sostenimiento del presidente del Gobierno de España depende, paradójicamente, de aquellos que quieren fragmentarse de España y, por consiguiente, alterar el orden constitucional del país.

En conclusión, el procés continúa. Y la prometida "convivencia" de Pedro Sánchez no se palpa.