Sánchez ordena al Gobierno otra embestida ideológica para tapar su parálisis
Moncloa asume que ha de guardar en un cajón su agenda legislativa. Y sin Presupuestos ni apoyos parlamentarios suficientes, apuesta por el agitprop y la propaganda.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, posa con el trofeo de la Copa América.
Faltan al menos dos meses para que se desbroce el panorama político en Cataluña y Pedro Sánchez tiene un plan. Un plan para camuflar la realidad: que el Gobierno no solo está atado de pies y manos con unos presupuestos desfasados y prorrogados, sino que es incapaz de sacar adelante proyectos legislativos de enjundia ante la falta de apoyos parlamentarios.
Por que en Moncloa reconocen -en privado- que hasta que no haya nuevo presidente de la Generalitat, para el PSOE, ERC y Junts “ni están ni se les espera”.
Casualidad o no, los últimos anuncios del Gobierno refuerzan a los de Santiago Abascal y enredan al PP. “Maniobras de distracción de un Gobierno que no puede gobernar”, denuncian a ESdiario fuentes de Génova 13.
Así que los ideólogos del presidente han decidido tirar por otros derroteros mientras “marean la perdiz” de la financiación autonómica con una convocatoria del Consejo de Política Fiscal y Financiera tan improvisada como inconcreta.
Por eso, Presidencia ha cursado instrucciones a los ministerios para reforzar una nueva ofensiva ideológica trufada a la vez de anuncios propagandísticos. Véase tan sólo dos en las últimas 48 horas: una nueva oferta de empleo público de 40.000 funcionarios y la bajada por sorpresa del IVA del aceite de oliva.
Sánchez se mostró provocador y desafiante en la sesión de control de este miércoles.
En el ámbito ideológico, tres anuncios más: la denuncia judicial contra el polémico presidente del parlamento de Baleares (de Vox); una nueva ofensiva en el Valle de los Caídos para desalojar a los monjes benedictinos y el anuncio este jueves del inicio del procedimiento para la disolución de la Fundación Francisco Franco.
Casualidad o no, está nueva agenda muy ideológica y sectaria refuerza a los de Santiago Abascal y enreda al PP. “Maniobras de distracción de un Gobierno que no puede gobernar”, denuncian a ESdiario fuentes de Génova 13.