ESdiario

'Caso Begoña Gómez'

Begoña Gómez en el banquillo: las 4 opciones que baraja el PSOE (y el PP) ante su declaración

Los "guionistas" de La Moncloa, como denominan desde el PP, ya están ultimando el diseño de la comparecencia de la mujer de Pedro Sánchez, como investigada, que se producirá este viernes.

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y su mujer, Begoña Gómez, durante la imposición de condecoraciones con ocasión del X aniversario de la Proclamación de Su Majestad el Rey, en el Palacio Real.

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y su mujer, Begoña Gómez.Europa Press

Publicado por

Creado:

Actualizado:

Pedro Sánchez, el presidente del Gobierno, está afrontando una de las semanas más duras desde que inició la actual legislatura: el Tribunal Supremo está desarticulando su plan trazado con la Ley de Amnistía socavando, así, la poca confianza que un necesario -para mantenerse en La Moncloa- Carles Puigdemont había depositado en él; ERC está lanzando un órdago de máximos, difícil de aceptar, para convertir al socialista Salvador Illa en president de la Generalitat; y, como colofón, su mujer, Begoña Gómez declarará en calidad de investigada (imputada) este viernes en los madrileños juzgados de Plaza de Castilla.

En otras palabras, las dos claras apuestas de Pedro Sánchez en una legislatura carente, por cierto, de políticas sociales -o de otro tipo- para tratar de mantener, así, su muy débil Gobierno que pende de múltiples fuerzas políticas y con intereses en pugna están fracasando: ni la Ley de Amnistía ni la presidencia de Salvador Illa, al menos por el momento, conseguirán restablecer la tan prometida "convivencia en Cataluña" -el único objetivo actual del Gobierno- por parte del líder del Ejecutivo español. El discurso de Pedro Sánchez, en suma, hace aguas por todas partes. No se sostiene.

En el Partido Popular no celebran "los males ajenos", aseguran a ESdiario desde la dirección nacional con palmaria sorna, pero, desde luego, en Génova 13 están poniendo a punto la maquinaria electoral por si hubiera que activarla ante unas anticipadas elecciones generales nada descartadas por mucho que lo nieguen desde el PSOE y el Gobierno. La realidad es la que es.

Sea como fuere, en el cortoplacismo estratégico que caracteriza a una Moncloa que va partido a partido -no le queda otra- la clara prioridad es que la comparecencia de este viernes de Begoña Gómez ocasione, uno, el menor daño al PSOE y, fundamentalmente, al Gobierno y, dos, permita extraer el mayor rédito político posible. Para ello, barajan cuatro posibilidades.

Actuar con normalidad democrática

Es una opción que barajan pero, desde luego, se trata de la menos probable. Consiste en que Begoña Gómez y el PSOE-Gobierno -en su cada vez más delgada línea que los separa- actúen con naturalidad y asista, así, la mujer de Pedro Sánchez a su cita con la justicia tanto sin un pretendido protagonismo como sin un afán de esconder la realidad. Esto es, sin artificios de ningún tipo. Asumir lo que toca, sin más.

Desde luego, se trata de la mejor opción que permitiría no incrementar una polarización y un descrédito de las instituciones que tanto afecta a la legitimidad de la democracia española. Desde el PP, sin embargo, la descartan, tal y como avisan a este periódico.

De 'parking a parking'

Esta opción que, desde luego, manejan los gurús de La Moncloa consistiría en esconder lo más posible la comparecencia y el eco mediático -las imágenes, fundamentalmente- que la comparecencia de Begoña Gómez irremediablemente ocasionará.

Consistiría en usar un coche, con lunas altamente tintadas, en las que no se distinguiera a la mujer de Pedro Sánchez en su interior, y que su itinerario transcurriera desde el parking de la residencia oficial del presidente del Gobierno -La Moncloa- hasta el interior del parking de los juzgados de Plaza de Castilla y, así, los periodistas tuvieran ingentes problemas para captar material gráfico de un día, desde luego, histórico para un Ejecutivo español. Nunca antes la pareja del presidente del Gobierno ha comparecido en sede judicial y, menos, con el mandato en vigor. En conclusión, esconder al máximo la cita judicial.

Potenciar el 'Free Begoña'

La más probable. Una estrategia totalmente contraria a la anterior. Consistiría en alcanzar el mayor rédito político de la comparecencia de Begoña Gómez convirtiéndola, como se intentó hasta ahora, en una especie de mártir de la derecha y la ultraderecha que cuentan, además, con un juez, Juan Carlos Peinado, totalmente entregado a la causa. Este es el -peligroso- mensaje hiperbólico que, precisamente, ha querido trasladar Pedro Sánchez en las dos célebres cartas "a la ciudadanía" y con el que ha querido obtener, incluso, rédito electoral en los recientes comicios europeos. Recuérdese, por ejemplo, cómo el presidente del Gobierno sorprendió hace un mes asistiendo con su mujer a un acto del PSOE en Benalmádena -en el marco de la campaña electoral del 9J- tras conocerse la citación de Begoña Gómez.

Lanzar una cortina de humo

Se trata de una estrategia muy recurrida por parte de Pedro Sánchez. En combinación posiblemente con la anterior, es probable que el PSOE lance un golpe de efecto -bien sea algo relacionado con el dictador Franco o una sospecha de corrupción de Ayuso- que mitigue el alcance mediático de la comparecencia de Begoña Gómez y, al mismo tiempo, encauce la citación judicial por el enfoque que más interese al Gobierno.

En definitiva, cualquiera de las cuatro opciones, o una combinación de varias, es posible. Así lo prevén, también, desde la dirección nacional del PP, tal y como trasladan a este periódico. Y con estas posibilidades encima de la mesa, ya están articulando una reacción.

tracking