La trama rusa cerca a Puigdemont y complica la amnistía: piden que le investiguen por traición

Una de cal y otra de arena para Carles Puigdemont y la aplicación de la ley de amnistía que le permita volver a España. Si ayer se archivaba la causa de Tsunami Democràtic que le acusaba de terrorismo, sólo unas horas después el prófugo catalán se ve cercado por otra causa: el caso Voloh o la llamada trama rusa del procés. El juez Joaquín Aguirre que investiga este caso ha elevado la causa al Tribunal Supremo y pide imputar a Puigdemont por los delitos de traición, malversación y pertenencia a organización criminal.

El juez Joaquín Aguirre ve toda una serie de indicios de delito contra una docena de personas, entre ellas Carles Puigdemont, por supuestamente mantener reuniones con colaboradores de Putin en las que llegaron a plantear el apoyo de Rusia a nivel económico y político para respaldar la independencia de Cataluña.

El magistrado Aguirre solicita al Supremo que asuma toda la investigación y no sólo la referida a los aforados. En la lista de afectados, además de Puigdemont, está el abogado del prófugo catalán, Gonzalo Boye, el ex responsable de Relaciones Internacionales de Convergència, Víctor Terradellas, la ex consellera y ex dirigente de Junts, Elsa Artadi y otras personas del círculo más cercano de Puigdemont como el periodista y escritor Carles Porta y el empresario Miquel Casals. La lista de señalados en la trama rusa incluye al ex presidente Artur Mas y al jefe de la Oficina de Puigdemont en Waterloo, Josep Lluís Alay.

Esta investigación trastoca los planes de Puigdemont de recibir la amnistía, pues la ley excluye el delito de traición como amnistiable "siempre que se haya producido tanto una amenaza efectiva y real como un uso efectivo de la fuerza en contra de la integridad territorial o la independencia política de España". El juez Aguirre valora en su exposición que "sí hubo una amenaza real y efectiva de que una potencia extranjera -Rusia- ejecutara actos perjudiciales para la integridad territorial de España".

Además, el juez Aguirre subraya el papel destacado de Carles Puigdemont en la trama rusa, que califica de "organización criminal de estructura piramidal". "Tanto Artur Mas como Carles Puigdemont tenían el liderazgo y el control de las acciones que tomaban sus cuadros directivos y disponían de la capacidad de suspender, interrumpir o modificar las actividades dirigidas a contactar con actores de influencia rusos", sostiene el magistrado del caso Voloh.