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El PP agita el "avispero" socialista por la claudicación de Sánchez ante ERC: "que se cuezan"

Los populares articulan una ofensiva total pero gradual frente a la voladura de la solidaridad fiscal y siembran dudas entre ERC y Junts ante un "nuevo engaño" de Sánchez

Cuca Gamarra y Alberto Núñez FeijóoFernando Sánchez / Europa Press

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El Partido Popular va a utilizar todos los resortes que estén a su alcance "para impedir que Sánchez reviente la solidaridad fiscal entre españoles a cambio de seguir en el poder". Una estrategia que va a pasar por varias fases: "poco a poco y dependiendo del recorrido que tenga este preacuerdo" tal y como adelantan a ESdiario fuentes de la dirección popular.

En estos primeros compases los populares van a poner el foco en la ola de indignación que ha levantado el preacuerdo en muchos dirigentes socialistas y que ha personificado el castellano- manchego, Emiliano García-Page con ese "hasta aquí" y la advertencia a que "el PSOE no avalará el pacto con ERC en el Congreso". Unas críticas a las que se ha sumado el propio Felipe González.

Unas críticas que no solo han retumbado en los muros de la Moncloa, si no que sus ecos han llegado a la calle Génova, donde como primera medida y pendientes de si este amago se puede convertir en el germen de una rebelión o se queda una vez más solo en palabras, han optado por "dejar que se cuezan en su propia salsa".

En privado son muchas más las voces -sobre todo de dirigentes territoriales del PSOE- que han recibido con estupor y verdadera consternación el preacuerdo entre Sánchez y ERC y se aferran a que "una cosa es anunciarlo y otra que se aplique", en línea con las dudas que está sembrando el Partido Popular. Estos socialistas sin conscientes de que, si este pacto se materializa, el poco poder territorial que mantienen quedaría reducido a cenizas.

Los dirigentes populares van a hurgar en la herida abierta y están instando a estos barones a que "pongan pie en pared" contra un acuerdo que rompería la igualdad entre los españoles. Les piden además que concreten ese rechazo "votando en contra de la modificación de la LOFCA", la Ley Orgánica de Financiación de las Comunidades Autónomas, que tendría que ser reformada, con mayoría absoluta, si este acuerdo se consuma.

Feijóo y María Jesús Montero en el Congreso

Alimentar la guerra ERC-Junts mirando a las bases

Paradójicamente y en último término, la modificación de la LOFCA también necesitaría el apoyo del archienemigo de ERC, Carles Puigdemont que, de momento, va a hacer todo los posible para que las bases de ERC tumben este viernes este preacuerdo. Junts resta cualquier valor al pacto asegurando que no otorga ni de lejos la soberanía fiscal a Cataluña.

el PSOE se vuelve a traicionar así mismo y tengo la sensación de que Sánchez vuelve a engañar a sus socios

El Partido Popular por motivos totalmente opuestos, también va a jugar a poner en duda este acuerdo: "el PSOE se vuelve a traicionar así mismo y tengo la sensación de que Sánchez vuelve a engañar a sus socios", denunciaba el portavoz popular Miguel Tellado. En cualquier caso, el acuerdo de máximos que ha arrancado ERC a Sánchez busca precisamente que las bases republicanas tengan muy difícil rechazarlo.

Papel esencial de las Comunidades del PP

Si este viernes, y a pesar de todas las presiones, las bases de ERC bendicen este acuerdo y Salvador Illa se hace con la presidencia de la Generalitat, las comunidades autónomas del PP van a jugar un papel decisivo y coordinado para impedir que se perpetre este ataque inconstitucional a la igualdad de los españoles.

Una de las más Comunidades más perjudicadas si este acuerdo se materializa va a ser precisamente la Comunidad de Madrid, el territorio que más aporta a la solidaridad nacional y donde su presidenta Isabel Díaz Ayuso va a combatir "con uñas y dientes" esta ruptura de la caja única, según confirman desde la Puerta del Sol.

Una estrategia que va a ser coordinada personalmente por Alberto Núñez Feijóo que aprovechará el tradicional inicio de curso en Galicia para empezar a concretar las iniciativas que los populares llevaran a Congreso Senado y Europa, que ya recela del concierto vasco a pesar de estar en la Constitución. Ofensiva que incluirá la movilización en la calle y que resumía muy gráficamente un dirigente popular: "por tierra, mar y aire".