SIGUE EL SILENCIO
El Gobierno continúa con su ridículo: Sánchez y Montero siguen mudos y callan por lo de Puigdemont
Tanto el presidente del Ejecutivo como la vicepresidenta felicitan en sus redes sociales a Salvador Illa por la investidura o reaccionan a los Juegos Olímpicos pero ni una palabra sobre una fuga de Puigdemont que muchos creen que ha sido permitida por ellos.
Han sido numerosísimas las reacciones durante toda la jornada sobre la nueva fuga de Carles Puigdemont. El expresidente de Cataluña se escabuía entre la multitud, huyendo de nuevo para no enfrentarse a la justicia, y lo conseguía. Todo ello a pesar de que pesa una orden de detención sobre él. Es por ello que las críticas han llegado, tanto para los Mossos d'Esquadra (que han fracasado con su famosa 'Operación Jaula') como para un Gobierno de Pedro Sánchez que desde luego no parece muy preocupado por lo sucedido este jueves en Cataluña.
Y es que el silencio sigue siendo la respuesta por parte de Sánchez y el resto de su Ejecutivo. De hecho, más sangrante aún es que tanto el presidente del Ejecutivo como su vicepresidenta primera, María Jesús Montero, hayan felicitado a Salvador Illa por la investidura pero sigan callando por lo sucedido con Puigdemont.
La ministra portavoz también guarda silencio
Otro de los ejemplos claros, al ser la más activa durante estos días en redes, es Pilar Alegría. La ministra portavoz sigue disfrutando de los Juegos Olímpicos en París y, a pesar de estar activa en las redes sociales, no se ha dignado a dar una opinión sobre lo acaecido con su socio Carles Puigdemont.
Evidentemente, el mensaje de apoyo de aquellos que se quedan al borde de las medallas y la celebración de las mismas en las olimpiadas por parte de los españoles son necesarias, pero no estaría de más un mensaje también sobre la vuelta, tras siete años fugado, de un Puigdemont que ha vuelto a conseguir escapar por la puerta de atrás. Ni ella ni mucho menos Sánchez o María Jesús Montero han hecho referencia a lo que será posiblemente uno de los días más recordados en la política española en los próximos años.