El desconcierto económico del Gobierno con Cataluña: el PSOE reconoce que no sabe qué ha cedido a ERC

Desde el Gobierno de España y desde el PSOE no explican qué acuerdos han alcanzado con los independentistas de ERC para investir a Salvador Illa president de la Generalitat porque, sencillamente, no lo saben. Esa es la conclusión que puede extraer este periódico tras semanas de preguntas, en público y en privado, a miembros del Ejecutivo y a socialistas que forman parte de la dirección nacional del PSOE.

Tan solo logran explicar qué es la financiación y qué significa singular aunado a la obviedad de que cada comunidad autónoma tiene sus peculiaridades. Y de ahí no salen. Es radicalmente imposible conseguir que expliquen a qué se refieren con "soberanía fiscal", dos palabras incluidas en eso que desde el PSOE tildan de documento de "acuerdo", cuando, en términos fácticos, no deja de ser una nota informativa al no estar -tan siquiera- firmada por ambos partidos políticos. No es, por consiguiente, un escrito de pacto al uso. 

Más aún, desde los entornos de los socialistas díscolos con Sánchez, encabezados por Emiliano García-Page y Javier Lambán, aseguran a ESdiario que desde la dirección nacional del partido no explican la dimensión real de lo acordado -o pretendido- con ERC "porque hasta les daría vergüenza exponerlo públicamente". 

Ciertamente, desde el Gobierno y desde el PSOE, en la cada vez más difusa línea divisoria entre el partido y el poder Ejecutivo, recurren a eufemismos y frases retorcidas -recordemos el reciente "lo que dice el acuerdo es lo que dice el acuerdo" de la vicepresidenta Montero para explicar, precisamente, el acuerdo- porque, en efecto, no saben qué más decir. 

¿El 100% de los impuestos para Cataluña? "Pues no lo sé"

Tal y como venimos avanzando en ESdiario, desde la dirección nacional del PSOE niegan, por una parte, que no han pactado un "concierto económico" para Cataluña con ERC y, por la otra, reconocen que no saben lo que realmente han pactado. Así están las cosas. Al menos han conseguido hacer president de la Generalitat a Salvador Illa y con eso se quedan, mientras dure el tirar para adelante.

Conscientes de que "soberanía fiscal" significa concierto económico -al puro estilo del que posee País Vasco o Navarra- pero que sin la pertinente modificación de la Constitución o, mínimo, de la Ley Orgánica de Financiación de las Comunidades Autónomas (LOFCA) -que requeriría de una mayoría absoluta en el Congreso, muy difícil de alcanzar con la intrincada aritmética actual-, juegan a dejar pasar el tiempo y, mientras tanto, al despiste para que todo se acabe olvidando. Más que nada porque legalmente es muy difícil de alcanzar lo que reclaman los independentistas. 

Es por ello que desde la dirección nacional del partido, encabezada por Pedro Sánchez, aseguran a ESdiario, que, pese a las críticas internas, "no hay un concierto económico firmado con ERC, eso no se puede deducir del documento", insisten, y sentencian que "Cataluña no tendrá el cien por cien de los tributos".

'Aquí no ha pasado nada', la difícil estrategia que intenta el PSOE y el Gobierno

Sin embargo, jugando a ese despiste con los periodistas, otras muy solventes fuentes de la dirección del PSOE consultadas por este periódico aseguran que "no se sabe" si Cataluña acabará teniendo el control del 100% de los impuestos, lo que sería un concierto económico que constituiría un total agravio comparativo con el resto de las comunidades autónomas contrario a la esencia de solidaridad entre regiones que rige la Constitución.

"Lo importante no es qué Administración recaude los impuestos, sino a dónde se destinan tales impuestos", esta se ha convertido en la afirmación favorita de todos los socialistas para decir algo y, al tiempo, no decir nada al ser preguntados por el acuerdo que han alcanzado con ERC. 

En conclusión, que pase el tiempo para ver si los independentistas se olvidan del ansiado concierto económico catalán y aquí no ha pasado nada. Esa es la estrategia que, por el momento, siguen desde el Gobierno y desde el PSOE.