Ábalos es más valiente que Page: rompe el voto tres veces y enciende la alarma en Moncloa

La votación del Congreso para reconocer a Edmundo González como presidente electo de Venezuela ha tenido una lucecita blanca de abstención: la del ex ministro socialista José Luis Ábalos. El que fuera número dos del PSOE cumple así las amenazas previas de que ya no se sentía atado a seguir la disciplina socialista al sentirse “perseguido” por el Gobierno por la auditoria encargada por Óscar Puente contra su gestión. El PSOE pierde por tanto un voto seguro, y eso en un momento en el que Pedro Sánchez no tiene asegurada la mayoría del Congreso y donde cada voto cuenta, en un gran problema.

José Luis Ábalos ha votado hasta tres veces distinto al PSOE en su vuelta al Congreso tras las vacaciones de verano: en el citado reconocimiento de Edmundo González como ganador en Venezuela, en contra la financiación singular para Cataluña y en la votación de toma en consideración de una reforma electoral propuesta por el PP para que los independentistas no puedan presentarse con papeletas distintas en las europeas dependiendo de la comunidad, donde el ex ministro se abstuvo y el PSOE votó en contra.

El que fuera el número dos del PSOE, actualmente en el grupo mixto del Congreso tras suspenderle de militancia su partido por el caso Koldo y obligarle a abandonar el Grupo Socialista, acaba con su promesa de seguir la disciplina socialista y da el paso de votar distinto, cosa que por ahora no se han atrevido otros socialistas como el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, que habla mucho contra la amnistía o contra el concierto fiscal a Cataluña pero sus diputados nunca cambian el voto. 

José Luis Ábalos se siente muy dolido y “va a votar en conciencia”, y no ha perdido ni dos días de la vuelta tras las vacaciones para demostrarlo, y con ello, mandar un recado a su ex amigo Pedro Sánchez: tendrás que ganarte mi voto. Y eso en un momento en el que Junts amenaza día sí y día también con romper el acuerdo con el PSOE, y hasta el PNV se desmarca en algunas votaciones, es otro dolor de cabeza en Moncloa.

Pedro Sánchez empieza el curso con derrota en el Congreso y con un bloque de investidura resquebrajado, y sólo le falta perder otro voto más con la “fuga de conciencia” de José Luis Ábalos. El sanchismo está tocado a nivel parlamentario y nervioso ante futuras votaciones clave como el techo de gasto y, sobre todo, los presupuestos. Sería una delicia que las cuentas del Gobierno acabarán dependiendo del voto de José Luis Ábalos.