Venezuela
Maduro da un bofetón a Sánchez por Margarita Robles mientras el presidente se acobarda ante el chavismo
El régimen de Venezuela llama a consultas al embajador de España tras calificar la ministra de Defensa al chavista de “dictador” pero en Moncloa siguen timoratos sin reconocer a Edmundo González
Pedro Sánchez con Albares y Margarita Robles
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, quiere ir con pies de plomo en su relación con Venezuela y sigue sin reconocer a Edmundo González como ganador de las elecciones pese a recibirle en Moncloa y darle asilo político. Pero en el chavismo no son tan prudentes y han llamado a consultas al embajador de España en Venezuela, amenazando con romper relaciones, por unas declaraciones de Margarita Robles.
En concreto, la ministra de Defensa, Margarita Robles, criticó abiertamente "la persecución y limitación de derechos fundamentales" que, a su juicio, sufren los opositores en Venezuela, y calificó sin rodeos de "dictadura" el régimen de Nicolás Maduro.
Esto ha provocado las iras del chavismo, que ha llamado al embajador de España en Caracas a comparecer porque considera que las declaraciones de Margarita Robles "apuntan a un deterioro de las relaciones entre ambos países". El régimen de Maduro también ha llamado a consultas a su embajadora acreditada en España.
El régimen de Maduro se refería sin ambages a "las insolentes, injerencistas y groseras declaraciones de la ministra española Margarita Robles", como las ha descrito el ministro de Exteriores venezolano, Yván Gil, en su canal de Telegram.
Con ello, el régimen chavista da un bofetón diplomático al Gobierno de Pedro Sánchez mientras éste sigue dubitativo con Edmundo González, demostrando que con el dictador no valen medias tintas.
El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, expresaba tras ello su respeto a la "decisión soberana" de Venezuela de convocar al embajador español en Caracas y llamar a consultas a su representante diplomática en Madrid, a la vez que se ha negado a calificar al régimen de Nicolás Maduro como una "dictadura", como lo había hecho Margarita Robles, demostrando al miedo del sanchismo al gobierno chavista.
