Se recrudece la crisis con Venezuela: Maduro detiene a dos presuntos 'terroristas' españoles
Según el gobierno hispanoamericano, trabajaban en un plan para asesinar a Maduro. España niega que sean agentes del CNI y sus familiares alertan que hace ya seis días denunciaron su desaparición
El Gobierno español ha negado que los dos ciudadanos españoles detenidos el 14 de septiembre en Venezuela sean agentes del Centro Nacional de Inteligencia (CNI). El ministro del Interior de Venezuela, Diosdado Cabello, anunció este sábado la detención de dos ciudadanos españoles, José María Basua Badovinos y Andrés Martínez Adasme, con "vínculos con el Centro Nacional de Inteligencia" español y con figuras cercanas a la oposición venezolana que estarían preparando "un plan para asesinar" al presidente del país, Nicolás Maduro.
Los detenidos habrían estado realizando actividades de espionaje, recopilando información sobre infraestructuras estratégicas del país, según fuentes venezolanas. Desde España, se insiste en que los individuos, naturales de Bilbao, no tienen vínculos con el CNI ni con ninguna relacionada con el espionaje y sus familiares presentaron una denuncia ante la Ertzaintza para denunciar su desaparación el pasado 9 de septiembre.
Los hechos se dieron a conocer por parte del ministro del Interior venezolano. Diosdado Cabello, después de que el Gobierno venezolano anunciara la detención, sugiriendo la existencia de un complot para atacar infraestructuras clave, como instalaciones militares y de telecomunicaciones.
La noticia generó una respuesta inmediata por parte del Ejecutivo español, que rechazó categóricamente estas afirmaciones. Fuentes diplomáticas españolas calificaron la situación de "preocupante" y señalaron que las acusaciones carecen de fundamento.
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En un comunicado, el Ministerio de Asuntos Exteriores español subrayó que "no tiene constancia" de que los detenidos estuvieran vinculados con operaciones de espionaje o con el CNI. "España niega rotundamente cualquier implicación en actividades de inteligencia en Venezuela", señalaron desde el Ministerio.
Relaciones a punto de estallar
Las consecuencias de este incidente podrían ser significativas para las relaciones diplomáticas entre España y Venezuela, que ya atraviesan un momento delicado. Las acusaciones de espionaje añaden tensión a un contexto ya marcado por diferencias políticas y por la crisis política, económica y social que atraviesa Venezuela.
Además, pidieron al Gobierno venezolano que ofrezca garantías sobre el estado y los derechos de los ciudadanos detenidos. Fuentes del Ministerio de Asuntos Exteriores han aclarado que la Embajada en Caracas ha enviado una nota verbal al Gobierno venezolano "pidendo el acceso a los detenidos, con el fin de verificar sus identidades y su nacionalidad".
Desde Venezuela, el Gobierno de Nicolás Maduro sostiene que estas detenciones forman parte de una serie de acciones para desarticular supuestos planes de injerencia extranjera en el país. Las autoridades venezolanas afirman que los detenidos operaban bajo la cobertura de ciudadanos normales, pero que sus actividades eran propias de agentes de inteligencia. "No permitiremos que fuerzas extranjeras atenten contra la soberanía de Venezuela", declaró un portavoz del Gobierno venezolano.