Estas son las medidas de Sánchez para el control de medios: censura prácticas que él realiza y con guiños a sus socios

El Consejo de Ministros ha aprobado su ‘Plan de Acción por la Democracia y contra los bulos’, o mejor dicho, su estrategia para intentar amordazar a los medios críticos con el sanchismo, que incluye toda una serie de medidas desde reformar la publicidad institucional o los delitos de honor y derecho a la rectificación, a guiños a propuestas exigidas por los socios de Pedro Sánchez como perseguir el oligopolio mediático, eliminar el delito de injurias a la Corona o dar dinero a los medios que publiquen en lenguas cooficiales.

El plan ha empezado a ser expuesto por el ministro de Justicia y Presidencia, Félix Bolaños, que ha defendido que el “plan fortalecerá y hará más limpia nuestra democracia” y que “los bulos son corrosivos para la información veraz”, lo que ellos consideran bulos, que es todo aquel que no aplauda a Sánchez, por supuesto.

Félix Bolaños ha relatado que aprobarán una rendición de cuentas obligatoria para todos los gobiernos, una reforma de la ley de secretos oficiales y una reforma integral del Código Penal que busca despenalizar los delitos de injurias contra la Corona y contra los sentimientos religiosos, algo exigido por los independentistas.

Félix Bolaños también ha relatado otra serie de medidas como establecer de manera obligatoria que anualmente se celebre el Debate sobre el Estado de la Nación -algo que no hizo Pedro Sánchez- o que las encuestas electorales tendrán que mostrar su ficha técnica con datos pormenorizados. También la reforma de los delitos al honor y el derecho a la rectificación, sin especificar en qué sentido concreto, pero para facilitar las denuncias contra los medios.

El listado de medios con su dinero y publicidad

A continuación, el ministro Félix Bolaños ha pasado la patata caliente al ministro de Cultura, Ernest Urtasun, cuota de Sumar, que ha comenzado su disertación vinculando los bulos y los peligros a la democracia con la extrema derecha. La medida más contundente, la creación de un registro de medios en el que se disponga de información sobre su propiedad y la inversión publicitaria que reciben. Para ello, se ha encargado la tarea a la CNMV, que van a reformar para que pueda asumir esas competencias. Algo que todos ven como la creación de un listado medios buenos y malos o para disuadir y presionar a los inversores de los medios.

Otra medida polémica es la reforma de la Ley de Publicidad Institucional “para que no se puedan falsear las audiencias y hacer más justo el sistema de reparto de la publicidad y evitar que con dinero público se financien pseudomedios”, ha expresado Ernest Urtasun. Una medida encaminada a obligar a repartir la publicidad institucional de forma más equilibrada y eliminarla de losa medios molestos con el sanchismo que califican de pseudomedios. Un reparto equilibrado de la publicidad que no hace ni el Gobierno de Sánchez ni los ejecutivos del PSOE, que priman a medios afines sobre otros.

También Ernest Urtasun ha anunciado protección a los periodistas del acoso por hacer su trabajo -curioso cuando un ex periodista de El País ha denunciado las presiones de Pedro Sánchez- y reformar la Ley de Seguridad Ciudadana para acabar con las sanciones que reciben los profesionales de la información por hacer su trabajo cuando implica cubrir las actuaciones de la Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. Asimismo, una crítica a los oligopolios mediáticos, que es precisamente una de las condiciones puestas por grupos como Podemos para votar a favor del plan de control de medios.