Puigdemont intimida a Sánchez y marca distancias con el PP: va a ir a su bola
"Nuestra vocación política no es dar estabilidad ni desgastar a nadie. Nuestro objetivo es defender Cataluña y los intereses de los catalanes, y quien nos ayude tendrá nuestro apoyo", publicó en X.com
Un niño observa una intervención telemática de Puigdemont
Carles Puigdemont sigue marcando el ritmo de las negociaciones políticas desde Bruselas, alejándose del Partido Popular y lanzando advertencias al PSOE y a Sánchez. "Nuestra vocación política no es dar estabilidad ni desgastar a nadie. Nuestro objetivo es defender Cataluña y los intereses de los catalanes, y quien nos ayude tendrá nuestro apoyo", afirmó el expresidente catalán en X.com. Su mensaje deja claro que el apoyo de su partido no está garantizado para ninguno de los grandes partidos.
Puigdemont ha enfatizado su postura firme respecto al PSOE, a quien acusa de intentar chantajearle para evitar el colapso de su gobierno. "No aceptaremos ser una pieza más en su tablero de poder", publicó en X.com, en un tono desafiante hacia Pedro Sánchez. El líder de Junts sigue elevando la presión sobre el partido socialista.
En medio de estas tensiones, Sánchez ha enviado a su mano derecha, Santos Cerdán, a Suiza para tratar de convencer a Puigdemont de no dinamitar las negociaciones. "Nuestro voto en relación con el techo de gasto no se decidirá con el objetivo de estabilizar o desgastar sino en función de lo que existe en la mesa de negociación para este caso concreto", escribió Puigdemont, refiriéndose al esfuerzo del PSOE por mantener su gobierno en pie a cualquier precio.
Respecto al Partido Popular, Puigdemont ha sido igual de tajante. "No somos moneda de cambio ni para la derecha ni para la izquierda", sentenció en la misma red social. Con estas declaraciones, se distancia tanto del PP como del PSOE, reafirmando su apùesta inequívoca por la independencia y su deseo de mantener a Junts como un actor impredecible en el escenario político.
El futuro de las negociaciones sobre el techo de gasto, donde Junts tiene un papel crucial, sigue siendo incierto. "Decidiremos nuestro voto basándonos en lo que consideremos mejor para Cataluña, no por presiones externas", afirmó Puigdemont, dejando abierta la posibilidad de sorpresas en las próximas semanas.