Ábalos pregunta a Puente por qué sus auditores callaron 4 años las deficiencias

José Luis Ábalos ya ha pasado a la historia como el primer ministro auditado por su partido. Pero hoy le da vuelta a la tortilla y se erige en el primer ex ministro que fusila a su Gobierno con 23 preguntas parlamentarias.

¿Cuánto ha costado la auditoría que ha pergeñado el ministro Puente sin que haya “culminado con la exigencia de ningún tipo de responsabilidad a los responsables de las irregularidades detectadas”?

Ábalos cree que ha sido una auditoría innecesaria. Supone la “utilización de una estructura ministerial en el Ministerio de Transportes para abrir una investigación administrativa interna en paralelo con el mismo objeto que una instrucción penal en proceso de investigación, sin que hubiera sido solicitada a priori por el juez instructor ni tampoco comunicada a dicho juez durante su elaboración, y que de igual modo, viene a enmendar la fiscalización y dictamen del Tribunal de Cuentas”.

Pero también la juzga ilegal. Porque ha llegado “a interrogar a imputados en un procedimiento judicial por los mismos hechos sin respetar las garantías procesales y, por consiguiente, en una clara vulneración de los derechos fundamentales de defensa y de la tutela judicial efectiva”.

Y porque invade competencias del Tribunal de Cuentas y enmienda su aprobación de los contratos. “En ninguno de los dos expedientes de contratación de las mascarillas, el Tribunal de Cuentas había cuestionado que haya más o menos ofertas, puesto que no es un requisito necesario y por tanto, se entiende aún menos que sea un punto de denuncia en el informe administrativo de Transportes”.

Y Ábalos ve extraño que los inspectores de Puente “no hayan advertido durante cuatro años de las supuestas deficiencias documentales que ahora señalan en “la auditoria” como es la ausencia de actas de recepción y expedición de las mascarillas, falta de documentación del control de las mismas y el depósito de éstas”. Y le choca que no lo denunciaran al Tribunal de Cuentas.

“Contrasta la ineficacia, las negligencias y la dejación de funciones de estos empleados públicos durante estos cuatro años atrás frente al trabajo realizado ahora para esta “auditoría”. Cuanto menos, es llamativo”.

Ábalos pide interrogar a todos los cargos incluido su sucesora

Ábalos invita a Puente a que interrogue a la autora de la auditoría. “Resulta cuanto menos controvertido que la dirección general bajo la que se realiza esta “auditoría” sea juez y parte. Que sea la misma persona que fue entonces responsable de la ejecución de los contratos a la que se haya encargado la dirección de esa evaluación interna”.

Y le reta a citar a todos los cargos de Transportes entre 2020 y 2021, incluido él mismo y su sucesora, para superar la tendenciosidad de su auditoría.

“Las conclusiones de la “auditoría son deficientes, sesgadas e incompletas al faltar los testimonios de varias personas implicadas en la conformación de los expedientes y no entrevistar a la totalidad de los implicados en el objeto del informe, como son por ejemplo los miembros del gabinete ministerial durante los años 2020 y 2021, la Secretaría de Estado, la Secretaría General de Transportes y Movilidad, la Secretaría General Técnica o al responsable de la cartera ministerial durante ese tiempo, entre otros, a quienes no se nos ha invitado a participar, ni tampoco permitido alegaciones”.

Ábalos pregunta cuál ha sido el criterio para seleccionar a los entrevistados, cómo sabe la autora del informe cuántas mascarillas se precisaban, cuándo se tuvo conocimiento de que no había actas de recepción de mascarillas. Si se supo antes del informe del Tribunal de Cuentas, ¿por qué no se le informó?

El ex ministro contrataca. “Si el conocimiento ha sido a raíz de “la auditoría”, qué Órganos/Unidades del Ministerio de Transportes eran responsables de haber detectado la ausencia de actas y albaranes y por qué no lo hicieron? ¿En tal caso, qué órganos y qué mecanismos han fallado durante estos cuatro años atrás?”.

El ex ministro le da la vuelta a la auditoría. Pide mano dura. “¿Qué tipo de responsabilidades administrativas va a exigir el ministro de Transporte a los responsables de los órganos administrativos (Oficialía Mayor, Dirección General de Organización e Inspección, etc.) encargados de la recepción y expedición de las mascarillas que debieran haber ejercido un correcto control de la ejecución de los contratos como ahora vienen a denunciar ellos mismos en “la auditoria” de Transportes después de cuatro años?”

“¿Qué superior jerárquico autorizó al Oficial Mayor a entregar al subteniente de la Guardia Civil la llave de la dependencia donde se custodiaban las mascarillas de Transportes?

Y Ábalos deja un cariñoso recado a Marlaska. “¿Cuántas mascarillas se llevaron al Ministerio del Interior y a qué organismos de dicho Ministerio? ¿Interior ha pagado el importe correspondiente a esas mascarillas?” La jugada de Puente le ha salido redonda: suma un nuevo diputado que fiscaliza al Gobierno.