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Pedro Sánchez pisotea la paridad en su gabinete mientras la impone al resto: siete hombres y una mujer

El BOE publica la nueva composición del gabinete de Presidencia donde lo femenino brilla por su ausencia mientras pide una mujer presidiendo la ONU o propone leyes para imponer la paridad en todos los organismos públicos

Pedro Sánchez recoge un premio de igualdad en la ONU

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Consejos vendo que para mí no tengo. Pedro Sánchez fue a la ONU donde en su intervención pedía, entre otras cosas, que el próximo presidente sea una mujer y haya alternancia de género. Además recibía en Naciones Unidas el premio 'He for She' que reconoce su trabajo por la promoción de la paridad y la igualdad de género. Pero unas horas después el Boletín Oficial del Estado (BOE) publicaba el nuevo Gabinete de Presidencia del Gobierno donde curiosamente la paridad brilla por su ausencia: siete hombre y una sola mujer.

En concreto, Pedro Sánchez reestructura su gabinete con ocho nombramientos en distintas secretarías generales y departamentos de Moncloa como el del director adjunto del Gabinete, que pasará a ser Ángel Alonso Arroba en sustitución de Antonio Hernando, el del secretario general de Política Nacional, José Fernández Albertos, y el del secretario general de Coordinación Institucional, Francisco José Salazar Rodríguez.

Además, el nuevo director del Departamento de Discurso será Jesús Javier Perea, el director del Departamento de Coordinación Política será Antonio Hernández Espinal, el director del Departamento de Políticas Públicas recae en Borja Monreal Gainza, el director del Departamento de Análisis Territorial es José Rama Caamaño y la directora del Departamento de Atención y Respuesta a la Ciudadanía corresponde a Silvia Calzón Fernández, la única mujer de los ocho nombramientos realizados.

Con ello, Pedro Sánchez se salta a la torera la paridad que exige a los demás con su 'proyecto de ley de representación paritaria y presencia equilibrada de mujeres y hombres' que impone la obligatoriedad de representación equilibrada de hombres y mujeres en las listas electorales, en el Consejo de Ministros, en órganos constitucionales y de relevancia constitucional, en el sector público estatal y en los colegios profesionales.

Es decir, en todos los organismos, consejos y empresas públicas debe haber como mínimo un 40% de mujeres… En todos salvo en el equipo más cercano a Pedro Sánchez donde él si puede elegir con libertad a las personas de su gabinete sin mirar el sexo y sin cuotas de paridad. Un auténtico ejercicio de cinismo.