Caso Errejón
La fiesta de Íñigo Errejón en casa de los de las hipotecas fijas: “Iban hasta arriba preguntando dónde comprar”
Simón Pérez y Silvia Charro relatan la juerga del ex portavoz de Sumar y sus becarios en su vivienda: “vino con unos aires, toda la noche sin dormir, aparecieron venga cubata, cerveza, porrito”
Simón Pérez y Silvia Charro junto a Íñigo Errejón
El portavoz caído de Sumar tras las acusaciones de acoso sexual a mujeres, Íñigo Errejón, era muy aficionado a las juergas hasta altas horas con sustancias, según relatan testimonios. En un crossover propio de una serie de Netflix, en que fuera fundador de Podemos estuvo de fiesta en casa de Simón Pérez y Silvia Charro, famosos por protagonizar un surrealista vídeo de las hipotecas fijas en 2017. El matrimonio ha relatado cómo fue la visita de Errejón a su vivienda y no tiene desperdicio.
“Venían de fiesta, enfiestados, todos hasta arriba, todos los amigos de Íñigo Errejón venían preguntando para comprar -se supone que droga- y estuvieron ahí toda la noche, me desperté a las 6 de la madrugada y aún seguían ahí”, cuentan Simón Pérez y Silvia Charro.
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¿Cómo acabó Íñigo Errejón en casa de Simón Pérez y Silvia Charro? El matrimonio famoso por su vídeo de las hipotecas fijas explica que fue a través de un amigo que en ese momento vivía en su casa: “teníamos una casa muy grande con dos cocinas, dos comedores, era como una casa doble, y habíamos dejado venir a un amigo que se quedó sin casa unos meses y que era muy de izquierdas. Era hijo de un preso político argentino y le escribía los escribía discursos a gente de Podemos”.
“Entonces de repente aparecieron unas 15 personas con Íñigo Errejón, todo su séquito de becarios, imagina un tío delgadísimo y al lado un montón de personas de la Universidad que iban detrás de él, uno pintándole y poniéndole maquillaje, el otro quitándole no sé qué, como si fuera un famoso de la tele”, relatan Simón Pérez y Silvia Charro que además confiesan que “no nos cayó nada bien”.
Simón Pérez y Silvia Charro relatan que ella estaba embarazada de siete meses y perdieron el bebé, y justamente esa semana “que estábamos en casa como en una burbuja fatal llorando, aparece Íñigo Errejón con todo su séquito, todos hasta arriba venga cubata, venga cerveza, venga porrito, venga no sé qué, y yo con el cojín toda llorosa viendo a la gente en mi casa”, termina su testimonio el matrimonio de las hipotecas fijas.