Ribera sin evacuar pueblos desbordó el Magro al desaguar 7.000 millones de litros

19:00 horas del 29 de octubre. La presa de Forata alcanza su tope de agua acumulada. 37,1 hectómetros cúbicos. Roza su capacidad máxima. Peligra rotura desde las 18:00.

La Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ), dependiente de Ribera, alerta al Cecopi, que informa a Mazón. Acude al centro de crisis. Un secretario de Estado de Transición telefonea a su consejera de Interior a las 20:00 horas para reiterar tal aviso. Pero no hubo rotura.

Ribera opaca públicamente la solución que explica tal milagro: sus masivos desembalses. Y su precio en vidas y daños. Una deliberada inundación de la ribera del Magro.

Una verdad sospechada por alcaldes afectados. La confirman datos y documentos de Ribera en poder de este diario. 

Su ministerio toma una decisión que salva Forata en la tarde-noche del 29-O de octubre, pero condena a los pueblos de la cuenca del Magro: inicia una espiral de vertidos de la presa sin previo aviso a la población afectada. 

Entre las 19:00 del 29-O y la 1:00 del 30-O la presa baja de 37,1 a 36,9 hectómetros cúbicos. Entre medias, apagón informativo. El Poyo bis.

Dos horas más tarde registra 36, 1 hectómetros cúbicos. Un hectómetro menos. 1.000 millones de litros vertidos ya al río.

El desagüe de Forata por Ribera prosigue esa noche trágica cuando el Magro ya anega Algemesí, Carlet, l’Alcudia, Guadassuar... Y mueren o se rescatan al límite vecinos.

Al final del 30-O, Forata ha desembalsado 7 hectómetros. 7.000 millones de litros de agua. El consumo anual de 100.000 personas.

El vertido puede ser mayor si se suma el agua expulsada según entraba en la presa para contener el nivel. Y todo sin un "agua va". 

Entretanto, Ribera quiere retratar el mutismo/absentismo de Mazón chivado por sus funcionarios. Lo vigilan más que al Poyo. Moncloa bombardea a llamadas desde las 20:00 a Mazón o a su consejera de Interior (Ribera, su secretario de estado, Montero, Sánchez…). Pero no les alertan del efecto de sus desagües de Forata: la inundación de municipios. 

Ribera sólo tiene ojos para la presa. A las 17:53 del 29-O, Forata ya sufre "peligro de rotura controlable"; y a las 18:05 "no puede asegurarse su control con las medidas y medios disponibles". A Ribera sólo le queda la bomba atómica: un desagüe masivo aunque inunde poblaciones.

La Confederación del Júcar avisa supuestamente a la Delegación del Gobierno y al Ejecutivo de Mazón de desembalses de Forata a las 16:44, 16:55, 17:56, 18:24, 18:55, y 19:34 del 29-O. 

Oficialmente, no hay más desagües el 29-O. Pero continúan esa noche y la jornada siguiente. A las 10:45 del 30-O Forata aún desagua 800 metros cúbicos por segundo.

Pese a tan grave decisión, Ribera ni alerta a los municipios vía Delegación o redes, ni al Cecopi, ni a Mazón del peligro de sus desembalses. Podían costar vidas. Y hubo tres muertos en Algemesí. 9 en toda la zona según la prensa.

¿Sus avisos por desembalses de Forata a Mazón y Delegación del Gobierno hablan de su probable efecto riada? Ribera calla. 

Este diario tiene pruebas de lo contrario. A las 16:55 Ribera informa que el Magro puede superar los 1.000 metros cúbicos por segundo “por el alivio de la presa” y verse "significativamente afectadas" poblaciones como Montroi, Real, Alfarp, L´Alcudia, Algemesí. 

¿"Afectada significativamente" es "inundada"? Ni Mazón ni Moncloa leen riada. Mazón sí comparte a la 17:35 un serio aviso de Ribera de que el Magro suma 1.000 metros cúbicos por segundo (casualmente el mismo caudal que reiteradamente expulsa Forata). 

Y Mazón alerta. "Se pueden producir desbordamientos generalizados en las áreas próximas al río". Omite que pueden provocarlos desagües de Ribera porque lo ignora.

Ningún municipio del Magro cuestiona que Ribera debía desaguar Forata, peor sería recibir 37.000 millones de litros por rotura de la presa, pero ninguno duda que debieron ser avisados de que su ministerio los iba a inundar. Y habrían planificado una evacuación previa a la riada.

"Se hubieran salvado vidas si nos hubiesen avisado"

El regidor de Algemesí, José Javier Sánchis (PP), confirma que recibió llamada de la delegada del Gobierno, Pilar Bernabé, a las 16:30 del 29-O. Predijo una crecida del Magro. Sanchís preguntó si se desbordaría. Bernabé replicó que le informaría luego desde el Cecopi. 

Nunca le llamó. Ribera alega que informa de sus desembalses a Bernabé, que incluso los sigue en redes. A las 18:30 el Magro inunda Almegesí tras repetidos desembalses de Ribera. 

"Se hubiesen salvado vidas si nos hubiesen avisado", lamenta Sanchís. "Somos trece pueblos. Bastaba una llamada para haberlos evacuado. Con un simple mensaje. El agua que va a bajar os va a matar".

Ribera tampoco alertó de la crecida y desborde del Poyo durante dos horas críticas (17:00 a 18:43), como destapó este diario y airea Feijóo. 

Y, como también reveló este diario, Ribera enterró en 2022 el blindaje del Poyo. Con sus discretos desembalses, suma tres detonadores de la tragedia.

7.000 millones de litros no es alivio de una presa. Es un tsunami. Ribera declina detallar sus desagües de Forata y avisos.