El informático que se querelló contra Begoña Gómez por intrusismo lo tiene claro: "Puede haber un doble delito"
El decano del Colegio Profesional de Ingenieros Técnicos de Andalucía ha sido contundente en su entrevista con ESdiario: cree que la esposa del presidente no estaba facultada para firmar los pliegos técnicos del software de la Complutense.
El próximo 18 de diciembre Begoña Gómez tiene una cita en los juzgados de Plaza de Castilla con el juez Peinado. Le va a tomar declaración por dos nuevos delitos que investiga dentro de la causa abierta contra la esposa del presidente del Gobierno: apropiación indebida e intrusismo profesional, ambos relacionados con el software que varias empresas donaron a la Universidad Complutense y que presuntamente podría haberse apropiado Gómez de manera irregular.
Ese software está valorado en unos 150.000 euros a los que hay que añadir 50.000 más que costó la adaptación de la herramienta al sistema informático de la Complutense. Para ese trabajo la universidad contrató a una empresa externa. Y es precisamente en ese contrato, en los pliegos técnicos de la licitación firmados por Begoña Gómez, donde podría estar el delito de intrusismo profesional.
Así lo entienden en el Colegio Profesional de Ingenieros Técnicos de Andalucía que promovieron una querella contra la esposa del presidente del Gobierno. El decano, Pedro de la Torre, ha hablado con ESdiario y ha sido contundente al respecto: "Vimos que el pliego de prescripciones técnicas estaba firmado por la propia Begoña Gómez", explica. Eso les "extrañó bastante" porque para firmarlo es preciso "tener la titulación facultativa necesaria" y además es preciso ser "funcionario o autoridad" dentro del organismo que lo licita.
Los hechos se remontan al pasado 11 de septiembre de 2023, cuando la licitación para la contratación del citado software fue publicada en la Plataforma de Contratación del Sector Público. Sin embargo, el pliego de prescripciones técnicas correspondiente aparece firmado por Begoña Gómez con fecha del 25 de julio de ese mismo año. Según el Colegio de Ingenieros Técnicos Informáticos de Andalucía, esta firma resulta inapropiada, ya que la esposa del presidente no posee la titulación necesaria para avalar un documento técnico de tal envergadura.