Lo último de Isabel Pantoja para romper con el pasado que la atormenta

Isabel Pantoja ya ha empezado su nueva vida. Atrás quedaron los días en los que la pena y la angustia hacían que su horizonte se cubriera de tempestad. Ahora mira al futuro con optimismo. De hecho, a los recientes retoques estéticos, me cuentan que Isabel quiere sumar un cambio en su cabello. Quizás cortar parte de su característica melena o darle un baño de color para refrescar su rostro. De lo que no cabe duda es que Pantoja está más vital que nunca. Hacía años que no se podía inmortalizar a la cantante saliendo de casa a comer con amigos. Una rutina, habitual para el resto, pero que se convertía en un imposible para ella, víctima de la agorafobia.

Isabel tiene tantas ganas de romper con su pasado que cambiará su peinado

Pero Isabel controla todos sus pasos. Parece que ha tomado las riendas de su vida y decide por sí misma. La experiencia carcelaria le ha reforzado y, en efecto, no necesita los consejos/trámites de su hermano Agustín. Por eso no me escamó que plantara a la revista Hola negándose a posar durante el bautizo de su nieta Ana. Insisten en que la celebración sirvió para acercar posturas entre la cantante y su hija pero, sobre todo, para mantener una conversación con Diego Gómez. El empresario, con quien Pantoja mantuvo una relación duradera, fue el invitado más inesperado de la celebración. Aunque ninguno quiere aclarar qué les une, hay quien ya barrunta que las conversaciones iniciales podrían reavivar el fuego. Es cuestión de tiempo.