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A Fernando Alonso se le ponen de corbata por culpa de una "vieja conocida"

Sara Carbonero tenía dos opciones después de que hasta el apuntador se enterara de que la había "cagado" con todo el equipo y eligió las más inteligente. Le alabamos el buen gusto.

Viki Odintcov en un sitio mucho menos peligroso.

Viki Odintcov en un sitio mucho menos peligroso.

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¿Qué es lo peor que le puede pasar a una it girl? Más o menos yo creo que todos lo tenemos claro: pasarse varias semanas pensando en el súper modelito que te vas a poner en una cita fundamental como es una pasarela de moda de prestigio donde todo el mundo estará pendiente de lo que lleves... y al llegar el día ponerte exactamente lo mismo que otra it girl. ¡Oh my God! ¿Puede haber algo más terrible?

Sí. Que una de ellas sea Sara Carbonero y se entere hasta el apuntador de que la has cagado con todo el equipo. Llegados a este punto la presentadora deportiva sólo podía hacer dos cosas: enfadarse como un mono o tomárselo con humor y optó por la segunda. Le alabamos el buen gusto.

La que no está para bromas últimamente es su compañera de profesión Danae Boronat. La presentadora deportiva de BeIN Sports está en un plan reivindicativo que seguramente no le hagan ni pizca de gracia estos chistes que hacemos nosotros aquí con las periodistas deportivas y sus modelis. De hecho, Danae su puso como una hidra hace un par de días con un chiste de inspiración machista en el que un colega varón le alababa profesionalmente pero aludiendo al clásico “las rubias no somos tontas”.

Boronat no sólo le cantó las 40 muy enfadada sino que luego lanzó un no menos indignado y misterioso tuit que nos ha llamado mucho la atención: “Un saludo a todos los enchufados/as, novios/as de, hijos/as de y un largo etc. Otros podemos decir con orgullo que nos lo hemos currado”.. No da nombres, no responde a nadie en concreto, pero ¿de quién habla? ¿a quién se refiere?

No podemos olvidar que mismamente su compañera de cadena y de programación Lucía Villalón anda estos días “rajando” de lo lindo en los medios contra el que hasta hace bien poco era su prometido, el futbolista mexicano Chicharito. Ahora le pone a parir, pero hasta antes de ayer no paraba de subir fotos de amor juntos a las redes... ¿Se refiere Danae a su compañera de cadena?

Claro que la lista de periodistas deportivas con relación sentimental o filial con influyentes personajes deportivos es muy larga. Lo que está claro es que a Boronat le van a salir “amigas” de debajo de las piedras con dardos envenenados como estos.

La misma Sara Carbonero aumentó notablemente su caché (que hoy se cotiza a precio de oro) cuando comenzó su relación con Iker Casillas. ¿Habla de ella? ¿O habla de Susanna Guasch, famosa reportera y presenadora deportiva de Atresmedia, sobrina de Tomás? ¿O de Melissa Jiménez, la novia de Marc Bartra? ¿O de Lara Álvarez, que estuvo saliendo con Sergio Ramos antes de salir con Fernando Alonso?

Precisamente otra exnovia de Fernando Alonso está on the top estos días gracias a un meritorio logro: nos los ha puesto de corbata a media humanidad.

Lo de que las novias de, parafraseando a Danae, se aúpen a los titulares internacionales por mostrar cacha ya está más que visto. Sin ir más lejos, las ex de Alonso suelen hacerlo de vez en cuando. Pero Viki Odintcova ha ido un paso más allá: ha enseñado chicha, sí, pero lo ha hecho en lo más de la más alta torre que diría Shrek y las imágenes dan miedo. Pero de verdad.

Y es que la modelo rusa ha revolucionado las redes sociales después de publicar las imágenes de una sesión de fotos a 300 metros de altura en un rascacielos de Dubai, jugándose literalmente la vida.

De hecho, no utilizó nada para sujetarse en el último piso de la torre Cayan, de 73 alturas y 306 metros, sólo la ayuda de dos expertos en fotografiarse de manera extrema en los edificios más altos del mundo.

La propia Viki (cuya relación con Alonso tras romper con Lara nunca llegó a hacerse oficial) ha reconocido que "todavía no puedo creer lo que hice. Cada vez que veo el vídeo me sudan las manos. Sé que lo hice no era correcto al ciento por ciento. Algo podría haber salido mal”. Cómo será, que después de protagonizar esta espeluznante sesión, la policía le obligó a firmar un documento prometiendo que no volvería a hacerlo.

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