La (más aún) millonaria aventura de Sara Carbonero que pasa por pedir dinero
La vida de la mujer de Iker Casillas es de color de rosa. Madre de dos retoños adorables, periodista, viajante, amiga y, por muchos, envidiada por estar con el ex del Real Madrid.
Sara Carbonero es una de esas mujeres que han nacido con estrella y que, parece, que lo tienen todo. Aunque, cómo se suele decir, de puertas para dentro sólo una sabe lo que tiene en casa. Pero de Instagram para fuera, al menos es así.
Casada con Iker Casillas – algo por lo que muchos y muchas ya la envidian- y madre de dos retoños, Martín y Lucas, que se consideran adorables. Da siempre una imagen de felicidad en sus fotos y de, cómo algunos califican, buen gusto.
Son todo odas hacía ella y, quizás, por eso, también son muchas las marcas que confían en Carbonero para ser su imagen y ayudarles a potenciar las ventas. Con sonoros cheques muy bien remunerados. Tanto, que es una de las cosas que le permite permanecer en Oporto dedicada a Martín y Lucas y alejada de Mediaset; a la que volvió hace poco y con una pésima experiencia.
Pero, más allá de eso, Sara también parece haber triunfado como empresaria. Y junto a dos amigas, Isabel Jimenez, también presentadora del telediario de Telecinco y Mayra del Pilar, una de las estilistas que Carbonero conoció en los pasillos de la cadena amiga.
Con ellas montó la empresa de ropa Slow love, dedicada a la moda, decoración y belleza, y apunta a que ya han despegado con fuerza. Todo un éxito en el poco tiempo de vida que tiene. Aunque, para ello, ahora tengan que pedir dinero.
Millonaria experiencia
Isabel, Sara y Mayra invirtieron un pequeño capital de 40.000 euros para fundar Slow Love y ahora, parece, que han logrado superar el millón de euros en facturación.
Una apuesta que se ha convertido en segura y para la que no han tenido que invertir en publicidad. La imagen de Sara, y lo conocida que es también Isabel, lo han hecho todo. Eso sí, si quieren seguir creciendo se plantean pedir dinero prestado… Buscar un inversor que les ayude a potenciar una idea que se forjó en los comedores de Telecinco y que ya está más que asentada.