Antonio David, harto de Carrasco, mueve hilos para dar la puntilla a su ex
El que fuera yerno de Rocío Jurado está cansado de tanta lucha. A la espera de que prosperen, o no, las denuncias de su ex contra él, ha encontrado la vía de escape… ¿perfecta?
La situación está más que tensa. Si eso es posible, claro está. La relación entre Rocío Carrasco Mohedano y su ex marido, Antonio David Flores, lleva rota muchos años y el ambiente entre ellos –y otros muchos miembros de la familia- se ha ido enrareciendo con el paso del tiempo pero, sobre todo, con los miles de feos gestos que han tenido a bien dedicarse.
Los puñales y las puñaladas traperas son frecuentes entre esta ex pareja y los hijos de ambos. Y la cosa es insostenible. Pero ellos siguen buscando bazas a su favor para conseguir que la justicia sume un granito más en la balanza. Y, en esta ocasión, le ha tocado el turno a Antonio David.
Primeras denuncias
Después de que Rocío Carrasco buscara acabar con él y moviera sus hilos para que el que fuera yerno de Rocío Jurado y Pedro Carrasco tuviese nuevos frentes judiciales abiertos, ahora es Antonio David el que busca las cosquillas a la hermana de José Fernando y Gloria Camila.
Recordemos que Rocío Carrasco presentaba hace poco contra Antonio David una denuncia relacionada con violencia de género y otra por supuesto alzamiento de bienes por, lo que ella definió, como ocultación de patrimonio. Unas denuncias que, de prosperar, podrían dar con los huesos de Antonio David en la cárcel. Sobre todo, por el peso de los supuestos delitos que Rocío le imputa.
Pero es ahora el padre de Rocío y David Flores el que quiere que Rocío le pague lo suyo y le reclama el pago de una pensión de 5.000 euros para afrontar los gastos mensuales de los dos hijos que tuvieron durante su matrimonio. Rocío y David viven con su padre desde hace mucho.
La sobrina de Gloria Camila desde que se peleó con su madre y no quiso volver a dirigirle la palabra y David desde hace relativamente poco. Una convivencia que está pagando Antonio David y por la que reclama a su ex lo que le corresponde. Para el futuro y con carácter retroactivo.
Qué viven con él es fácil de demostrar pero, aún así, parece que la vía legal por la que Flores pide lo que cree suyo no marcha bien. Ya la echaron para atrás una vez y, en este segundo intento, la cosa podría alargarse más de lo que él quisiera.
Un alivio para Rocío que, centrada en Fidel, en sus amigos y en ciertos problemas económicos que ya vieron la luz hace tiempo, no piensa hacer frente a ese gasto mensual. Al menos que un juez se lo ordene, claro está.