Pólvora del Rey
Hay que huir de políticos que te prometen algo gratis: te tratan de tonto. El populismo dispara con pólvora de Rey, prometiendo algo para ti que terminará pagando tus hijos, con sufrimiento.
En los heroicos tercios españoles los arcabuceros debían pagarse de su propio bolsillo la pólvora que utilizaban en la batalla, esto suponía gastarla con mesura, y no disparar hasta tener un objetivo seguro.
No quiero jubilarme a los 60 y dejarle el pufo a mi hijos, quiero jubilarme a los 68 y que mis hijos vivan mejor
Sólo en caso de asedio se les permitía utilizar la de los depósitos reales; en tal circunstancia, abrían fuego con suma ligereza y sin miramientos. Se decía entonces, que disparaban con pólvora del rey.
¿Qué aplaudís exactamente cuando la nueva política con coleta os dice que os va a jubilar a los 60?, ¿qué mérito tiene eso, lo va a pagar él?;
No, lo van a pagar tus hijos, vete y dales un beso a ellos.
Ni un duro
Porque lo que no te cuenta este nuevo mesías laico es que las pensiones públicas se pagan con el dinero que se detrae vía impuestos a los activos que en cada momento trabajan duro para salir adelante, él no pondrá ni un duro.
Nadie metió tu dinero en una hucha mientras trabajabas, no te equivoques; a ti te quitaban parte de tu sueldo para pagar a los jubilados de entonces, y a tus hijos les quitarán parte de su sueldo para pagar las tuyas. Cuantos más jubilados, más tendrán que pagar tus hijos, ¡qué altruista Don Pablo!
Reino Unido acaba de retrasar la edad de jubilación hasta los 68, algo que parece razonable teniendo en cuenta que la esperanza de vida no deja de crecer en esta sociedad capitalista que es tan mala y tan tóxica que, según los expertos, los nacidos hoy ya vivirán de media 100 años.
Yo no quiero jubilarme a los 60 y dejarle el pufo a mi hijos, quiero jubilarme a los 68 y que mis hijos vivan mejor.
La diferencia entre un estadista y un populista es que el primero te dirá lo que no quieres oír —a riesgo de perder votos—, pero mirando al futuro; y el segundo te dirá en cada momento lo que quieres oír —para que le sigas votando—, aunque eso implique vivir bien una década, y luego acabar destrozando la vida de generaciones venideras enteras como hacen siempre en todos los sitios donde gobiernan.
Todo el mundo entiende que no puedes tener a un minero cuarenta años arrancando carbón, o que no es humano tener a una persona de 65 años colgada de un andamio un día de invierno, pero hacer una ley extensible a todas las profesiones para recibir el aplauso mediático habitual y votos, no es nada elogiable.
Mientras te regalan los oídos con cantos de sirena, están destrozando el futuro de la siguiente generación.
Y digo que lo pagarán tus hijos porque los suyos no lo harán, de eso que no te quede ninguna duda.
Huye cada vez que un político te prometa algo gratis. Si no te explica que todo tiene coste, te está tratando como a un tonto
Los hijos de Varoufakis
Los hijos de Varoufakis estudiarán en las mismas universidades privadas británicas en las que estudió su padre. El hijo de Fidel Castro seguirá navegando por el Bósforo en un yate, y la hija de Chávez continuará dando la vuelta al mundo de compras por todas las millas de oro de las grandes ciudades.
Todas estas promesas de una vida mejor para “el ahora” sin pensar en “el mañana”, son las mismas que llevan arruinando países décadas, llevando a pueblos enteros que vivían más o menos bien, a las colas del hambre de todos los paraísos comunistas. Y en esas colas estarán, te lo repito, tus hijos, no los suyos.
Lo gratis no existe
Cada vez que un político te prometa algo gratis, huye de él. Si no te explica que todo tiene un coste, te está tratando como a un tonto.
No hay nada gratis, todo nos cuesta dinero. Gastar siempre más en todo no es ningún mérito, sabe hacerlo cualquiera.
Elige a aquel político que te explique el impacto de cada euro en el futuro de tus hijos, aquel que no te no te prometa gastar más, sino mejor; el que te diga que igual recortando y gastando menos, nosotros viviremos un poco peor… pero nuestros hijos vivirán mucho mejor.
¿Recortes?
Los recortes no matan, aunque como buenos populistas cada vez que muere alguien por cualquier causa por la que se lleve muriendo desde el principio de los tiempos, te hagan creer que esta vez es por los recortes en esos estúpidos montajes de falsa relación causa-efecto.
Lo que mata es el despilfarro, lleva matando países enteros mucho tiempo.
Tú quizá no lo veas, tú vivirás bien… pero lo verán tus hijos, cuando necesiten ir al depósito y ya no haya pólvora para luchar, sólo ratas.
Ellos sólo quieren poder, no tendrán el más mínimo cuidado con tu hacienda para llegar a él, al fin y al cabo es tuya… ellos disparan con pólvora del rey, y aunque no lo sepas, tú eres el maldito rey.