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Puigdemont fue abducido pero le devolvieron en 24 horas

Los marcianos le bautizaron 'Puigdemoon' y querían estudiar su parecido con ellos, pero le devolvieron tras escucharle su "derecho a orinar" a mitad de camino por el espacio.

Puigdemoon, explicando su abducción

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El president de la Generalitat, Carles Puigdemont, fue abducido por una nave procedente de Marte justo antes del verano, según ha trascendido a través de un comunicado emitido por los propios marcianos al que ha tenido acceso El Pato Cojo.

Aunque la idea inicial era observarlo durante varios meses, Puigdemont fue devuelto a la Generalitat cuando apenas habían transcurrido 24 horas, en circunstancias extrañas que han obligado a la expedición a remitir una nota "por transparencia".

Junqueras y Rapero, en la agenda

"Nos parecía el ejemplar de ser humano más parecido a nosotros y decidimos llevárnoslo para estudiarlo en una de nuestras lunas, Catalonimoon 666. La idea era llevar a Junqueras también, pero nos dio miedo porque teníamos los víveres contados", explica la nota marciana.

"Descartamos al jefe de los Mossos, señor Trapero, al carecer de espejo en la aeronave, supusimos que lo iba a pasar fatal sin poder mirarse durante dos años luz de travesía. La abdución del presidente fue bien, él ya estaba flotando cuando le cogimos y eso facilita las cosas mucho y ahorra combustible y elimina riesgos de multas de Ada Colau. Por no hablar de que la rapidez es fundamental para evitarte ser apedreado por Arrán como cualquier turista", prosigue.

Una embajada en Marte

"El caso es que, aunque todo comenzó muy bien, a la media hora se torció. Puigdemont insistía en que paráramos en una gasolinera, a reivindicar su derecho a orinar. Y ya nos dijo que se negaría a acatar las decisiones del Congreso marciano, en el que sólo hablaría si le dejaban hacerlo en catalán. Pudimos calmarle prometiéndole que así sería, pero al rato todo se estropeó", continúa.

"Podéis llamarle Puigdemoon si queréis, es un héroe estelar", afirma su entorno

Según la versión marciana, el líder independentista preguntó si en Marte se podían ver los partidos del Barça y reclamó una reunión inmediata con la "comunidad secesionista del planeta para fundar allí una embajada de Cataluña y situar al frente a una tal Carmen Forcadell. Exigió igualmente que se organizaran conciertos de Lluis Llach en todo el planeta rojo y exigió conocer a nuestro Pedro Sánchez para poder abofetearle y dialogar", apostilla el comunicado.

En ese momento, el capitán de la aeronave dijo sentirse "hasta los tentáculos" y, con un frenazo brusco que desparramó las existencias de fuet que Puigdemont llevaba encima, dio media vuelta rumbo a Barcelona, a tiempo de que el president presenciara una performance de las CUP en las que seis activistas vestidos como Mandela quemaban coches de la Guardia Civil mientras sonaba 'Imagine' de John Lennon.

Puigdemoon

El president de la Generalitat, que tiene previsto hacer una intervención de cinco horas y cuarto en el estudio-jacuzzi principal de TV3, considera que gracias a su actitud ha librado a España de una invasión total marciana, según fuentes de su entorno. "Podéis llamarle Puigdemoon si queréis, es un héroe estelar", afirman.