Patricia Conde enloquece ante las acusaciones de inmoral por parte de su ex

Era una de esas parejas que enamoraba. Los dos guapos y con éxito. Patricia más conocida por la faceta televisiva que mantiene desde hace años, y Carlos, en su Mallorca natal, por la parte de empresario que ejerce desde siempre.

Se conocieron y todo se mantuvo en una nube hasta su boda. Un momento de ensueño, en un lugar mallorquín fácil de envidiar y Patricia vestida con un diseño de Elie Saab. Pero las mariposas en el estómago duraron poco y, al final, lo suyo, a pesar de haberse convertido en padres hace poco, se fue, literalmente, al garete.

Algo se intuía, aunque se que a toro pasado es fácil vaticinarlo, cuando se tomaron varias imágenes de ellos discutiendo y con cara avinagrada durante el viaje de novios. Raro que una pareja de recién casados discutieran de esa manera en el que, se supone, es uno de los momentos más especiales.

Un reflejo de lo que iba a pasar después.

Duras diferencias

Cuando ambos se separaron recordemos que la guerra empezó entre Carlos Segui y Patricia Conde. La firma del divorcio, unida a la lucha por la custodia del pequeño Lucas fue demasiado para una pareja que, dicen, se había querido tanto. Y ahora ha sido Segui el que ha decidido contarlo en la revista Vanity Fair.

Lo ha revelado, en la que es su primera entrevista desde la separación, desde su punto de vista: cruentas guerras y la lucha –que marcó emocionalmente- por poder ver a su pequeño. Todos recordamos aquellas fotos de Carlos y su madre intentando recoger a Lucas en casa de Patricia y que nadie les abriese la puerta…

Después, todo se “normalizó y pudimos ver a un Carlos tranquilo, viniendo mucho a Madrid y disfrutando con su pequeño en el que era un restaurante mallorquín de unos amigos en la zona de la calle Ponzano.

Ahora Carlos confiesa y asegura que todo fue un suplicio. Lo recuerda como pesadilla y cercano a lo inmoral. Sobre todo la parte en la que, la separación, la distancia con el pequeño, se unió a una denuncia de Patricia por supuestos malos tratos psicológicos, con petición de pena de cárcel de dos años, y que le impidió ver a Lucas durante 35 días.

Conde, que estaba sufriendo ya alguna crítica por su trabajo, no ha quedado indiferente a los comentarios de su ex. Cuando todo iba más o menos rodado y se entendían por el bien de Lucas, llega esto. ¿Por qué ahora? Algo más hay.

Sea como fuere, Patricia está dispuesta a contraatacar…