La genialidad de Sánchez: pagar la Universidad a rentas altas y bajas por igual

Pedro Sánchez Castejón busca su lugar bajo el sol, algo tan difícil de lograr en el convulso mapa político español como sencillo de definir: seguramente le bastaría con parecerse un poco al PSOE de antes y nada al Podemos de ahora. El espacio de la izquierda está huérfano, salvo en su extremo, y el del centro-izquierda también, aunque allí muerda Ciudadanos con ganas una parte de sus votos.

Su idea provocaría que el nieto de Botín y el hijo de un parado pagaran los mismo por la matrícula

Se puede comprender, en fin, que el sanchismo dramatice en algunos ámbitos y con algunos mensajes, que no todo va a ser apoyar al Gobierno en Cataluña o pactar la financiación autonómica con el PP, en el caso de que se lo permitan las comunidades socialistas, por cierto. Aunque ésa es otra historia.

El caso es que Sánchez lleva varios días insistiendo mucho en lo progresista que es, por ejemplo, la matrícula universitaria gratuita, que presenta como una garantía de que los más desfavorecidos puedan iniciar estudios superiores. Así lo dice él mismo:

Es decir, que la justicia social pasa por abonarle desde el Estado -esto es, desde el bolsillo de todos- la matrícula por igual a todo bicho viviente, sin importar la renta familiar ni, incluso, el rendimiento académico propio, no vaya a ser que sea muy bajo y no llegue con culpar a la sociedad en lugar -quizá- de a la falta de esfuerzo.

Lo que gana Pedro

Digámoslo con ejemplos concretos, tomando como referencia al promotor de la idea: según se ha encargado el propio PSOE de difundir, el salario de Pedro Sánchez en su nueva etapa al frente del partido es de "4.134 euros al mes". No está nada mal... pero es que además es bastante superior.

Se les olvida mencionar que las retribuciones reales son las que recoge la cifra bruta anual, que luego se divide en 14 pagas ya la que se le restan las correspondientes cotizaciones y retenciones. Es decir, Sánchez Castejón tiene un sueldo real de en torno a 102.000 euros cada año, técnicamente superior al que recogen los Presupuestos Generales del Estado para el presidente del Gobierno.

Sean los 4.000 euros con truco que ofrece Ferraz para disimular o los más de cien mil que en realidad cobra el líder socialista, ¿está diciendo que sus hijas, ganen lo que ganen sus padres y rindan lo que rindan ellas, no tienen que pagar ni un euro por matricularse en la Universidad?

Sánchez tiene dos casas, ahorros y un sueldo de 100.000 euros. Con su propuesta, sus hijas tendrían también matrícula gratis

La idea del PSOE, que contradice lo que hace apenas unos años criticaban los propios rectores en sus informes anuales de la CRUE que hoy esconden, (antes consideraban injusto que toda la sociedad costeara la Universidad de todo el mundo fueses cuales fuesen las rentas familiares y los expedientes académicos; hoy quieren que entre todo el mundo para que no se descubra el overbooking de facultades innecesarias); vendría a destinar el mismo dinero al nieto de Botín, a los sobrinos de Amancio Ortega o a los hijos de Cristiano Ronaldo que a los del parado de larga duración o al empleado mileurista: los descendientes de todos ellos tendrían matrícula gratis por igual.

Él sí puede pagarlo

En el caso de Sánchez, su última declaración de patrimonio y bienes de cuando era diputado (ahora no tiene obligación de hacerla pública) reforzaba su estatus económico al consignar que era propietario de dos viviendas y de un garaje, además de los ahorros y el plan de pensiones correspondiente. Y eso sin contar con los ingresos de su mujer, desconocidos pero en todo caso existentes. ¿De verdad el líder del PSOE no puede costearle la primera matrícula a sus hijas para que los de otros, con menos recursos, tengan cubierto eso y además una beca?

El 'gratis total' de Sánchez no existe: que no lo pague el usuario del servicio no significa que no se tenga pagar, vía impuestos, desde la hucha de todos los ciudadanos. Y hacerlo universal, sin importar las rentas de origen, es en realidad una injusticia: dar lo mismo al hijo de un futbolista millonario que al de un desempleado no parece una gran idea. Pero es la idea de Pedro.