Gasolina por las nubes
El precio del petróleo sigue alto y provoca un encarecimiento de la gasolina que no consigue frenarse. Aunque las tarifas siguen siendo menores a las de la UE, la renta también es inferior.
La gasolina está por las nubes y desde abril pasado, hace cerca ya de un año, no deja de arañar los bolsillos de los conductores. Y es que el precio medio del litro de gasolina ha repuntado por séptima semana consecutiva, manteniéndose así en niveles máximos desde la última primavera, según datos recogidos por EP a partir del Boletín Petrolero de la Unión Europea (UE).
En concreto, el precio del litro de gasolina ha escalado hasta los 1,256 euros, tras registrar esta semana una ligera subida del 0,052%. En el caso del gasóleo, ha vuelto a dar un pequeño respiro al encadenar su segunda caída consecutiva (-0,06%). Así, su precio se ha situado en los 1,162 euros, aunque manteniéndose en máximos desde julio de 2015.
El Brent no para
Este nivel estable en los precios de los carburantes se ha producido en una semana marcada por la caída en los precios del crudo, que se ha alejado de la cota de los 70 dólares por barril que tocó en enero, aunque hay que señalar que 2017 fue, a efectos de coste, un año muy negativo para el consumidor, con tarifas desmadradas del Brent. Así, el barril de crudo de esa 'denominación', de referencia en Europa, cotizaba este jueves a 65,24 dólares, mientras que el Texas americano se intercambia a 61,46 dólares.
La gasolina es más barata en España que en Europa, pero también la renta es inferior
Con los actuales precios, llenar un depósito de 55 litros de gasóleo supone para el consumidor algo menos de 63,91 euros, lo que representa unos cinco céntimos de euro menos que hace una semana. Para el caso de la gasolina, el llenado de un depósito de 55 litros tiene un coste de 69,11 euros, lo que supone unos cinco céntimos más que en la pasada semana.
Menos que en la UE
La gasolina es más barata en España que en la media de la UE y la zona euro, donde el precio de venta al público del litro de combustible Euro-Super 95 se sitúa en 1,388 euros y 1,426 euros, respectivamente, mientras que el litro de gasóleo cuesta 1,283 euros en la media de la UE y 1,283 euros en la eurozona.
El menor nivel de precios finales con respecto a los países del entorno se debe a que España, pese a las subidas del IVA, a los mayores impuestos y a los nuevos gravámenes al biodiésel, sigue contando con una menor presión fiscal, en general, que la media comunitaria. Aunque es una conclusión equívoca: aunque el precio sea menor, el esfuerzo pude ser mayor debido a la menor renta per cápita de los españoles.