Una lacra ruinosa llamado impago
Más de la mitad de los empresarios españoles sufrió retrasos en los pagos en 2017, lo que les supuso solo en el último trimestre un coste de más de 1.100 millones de euros.
El 52% de los empresarios españoles reconoce haber sufrido impagados a lo largo de 2017, frente al 35% del año anterior y el 12% aplica intereses de demora, dos puntos porcentuales por encima del ejercicio precedente, según los datos de la quinta edición del libro Análisis del comportamiento de pagos empresariales realizado por Informa D&B.
Sin embargo, los pagos puntuales en España siguen incrementándose, llegando a alcanzar el 55% a finales de 2017, cuatro puntos porcentuales más que en 2016. El 40% de los encuestados opina que la aplicación de un régimen sancionador ayudaría a mejorar los plazos de pago.
Según la directora del Departamento de Estudios de Informa D&B, Nathalie Gianese, el periodo medio de pago de las organizaciones nacionales alcanzó su mínimo histórico en el tercer trimestre de 2017 con un registro de 84,30 días, seis días menos que un año antes. En este periodo, el plazo medio de pago se mantuvo por debajo de la media europea.
Un coste disparado
En diciembre de 2017, el retraso medio de pago en España, según los datos del informe, fue de 12,52 días, subiendo tras doce trimestres de descenso consecutivo, y el plazo medio pactado de 74,44, quedando el periodo medio de pago efectivo en 86,96 días.
El conjunto de los retrasos de las empresas supone un coste directo para el tejido empresarial de 1.144 millones de euros en los tres últimos meses del año.
Los retrasos de las empresas supusieron un coste directo para el tejido empresarial de 1.144 millones de euros en el último trimestre del año
Dentro de las causas del retraso en los pagos, el 38% de los encuestados opina que son de tipo financiero, el 28% cree que son de origen administrativo y el 24% asegura que se trata de demoras intencionadas.
Los tres principales problemas percibidos por las empresas españolas son la aparición de nuevos competidores (para el 24%), la situación económica actual, (para el 21%) y encontrar nuevos clientes (para el 12%).
Levísima mejora
En diciembre de 2017 se registró una mayor puntualidad en los pagos entre las micro y pequeñas empresas, el 61% y 54%, respectivamente, frente al 33% de las medianas y al 14% de las grandes. Aunque desde el año anterior, el periodo medio de retraso ha mejorado para las empresas de cualquier tamaño excepto para las micro, que con 14,21 días son las que más demoran.
Tan solo Ceuta supera los 20 días en el retraso medio al finalizar 2017 (24,93). La que mejor se comporta es Navarra, con 6,84 días de media de demora.
Navarra, La Rioja, Aragón, País Vasco y Galicia registraron una mayor proporción de pagos puntuales, superando el 60%, y Madrid, Canarias y Ceuta las más reducidas, con el 48%, 42% y 41%, respectivamente.
En cuanto a los sectores, Administración lidera el 'ranking' con una media de 20,30 días de retraso, superando los 17,58 de Otros servicios. En el lado opuesto, Industria cuenta con la media más baja, 10,17 días de demora y le sigue Comunicaciones, con una media de 11,35 días.