Así contesta Errejón cuando le preguntan si sigue siendo amigo de Iglesias
El culebrón no para en Podemos, con nuevas entregas que parecen un capítulo de "Al salir de clase" y una respuesta de Errejón que deja definitivamente claro cómo están las cosas.
Desde hace mucho tiempo, la vida en Podemos parece escrita por un guionista de 'Al salir de clase', la célebre serie para púberes alterados que narraba sus amores, odios, celos, traiciones y tragicomedias entre pústulas de acné y "o seas" con la ese final muy alargada.
El culebrón teenager de Errejón e Iglesias, con Carmena al fondo, esconde probablemente algo tan antiguo y ordinario como el deseo, que todos tienen individualmente, de hacer las listas a su antojo, colando a los amigos y represaliando a los adversarios, para que el festín de dinero público cómodo que supone convertirse en cargo institucional se reparta con los colegas.
Y luego, tal vez, pero siempre a continuación, una batalla por el control futuro de Podemos: si al dúo Carmena/Errejón le va bien en Madrid y a Iglesias le va mal en las Generales, todo quisque da por hecho que el bueno de Íñigo asaltará los cielos de Galapagar.
Pero eso será en otro capítulo. Mientras, el culebrón se resume como nada en tres tuits, de celebridades y anónimos, que lo dicen todo de cómo es percibida la bronquita postadolescente:
Para quienes tengan pereza de escuchar directamente a Íñigo, la respuesta a la pregunta que le formula Angels Barceló es la siguiente, en ese tono tan habitual de Errejón de querer estar en misa y repicando: "Me gustaría pensar que sí. Pero estamos en tareas que dificultan la conciliación de afectos y de la lógica en política". No, no digan nada.
Y tú más
El segundo tuit que mejor refleja la crisis de los protas de Pudimos lo trae otra emisora de radio, que prolonga el anticipo ofrecido por la Ser sobre la relación sentimental entre Íñigo y Pablo con el desafío político entre ambos: si el segundo dio por excluido de Podemos al primero tras marcharse con Carmena; el segundo desafía ahora al primero diciendo que él sigue en Podemos y que, si le va bien en las elecciones, el que va a sobrar es el Marqués de Galapagar:
El último condensa, con humor, la irrupción de Carmena, su adopción de Errejón y la exclusión de Iglesias, fuera de esta simulada de Los Simpson, que valen para un roto y un descosido: