La imputación de Aguirre, la herencia de Ayuso y la Justicia a dos velocidades
La decisión de la Fiscalía de pedir investigar a la expresidenta de Madrid, junto a los también expresidentes Cifuentes y González, ha hecho arder las redes en las últimas horas.
Van a seguir siendo muy malos tiempos para el PP de Madrid. La imputación de Esperanza Aguirre por uno de los casos de corrupción vinculados a los populares que investiga la Justicia es la gota que faltaba.
Las redes están que arden después de que la Fiscalía entregara este viernes al Juzgado número 6 de la Audiencia Nacional un escrito en el que solicita al juez del Caso Púnica, Manuel García Castellón, la imputación de la expresidenta de la Comunidad de Madrid por delitos de corrupción por la financiación ilegal del PP de las campañas de 2003, 2007 y 2011.
Y por si no hubiera bastante, el ministerio público ha pedido que declaren también en calidad de investigado su sucesor, Ignacio González, y la expresidenta, Cristina Cifuentes, los tres máximos dirigentes del Gobierno de Madrid desde 2003 hasta 2017.
Damnificados por esta bomba judicial son, aunque no lo quieran, los actuales dirigentes y representantes institucionales del PP en la Comunidad de Madrid, con Isabel Díaz Ayuso a punto de convertirse en presidenta regional, y con José Luis Martínez Almeida al frente de la Alcaldía de Madrid. Y los internautas han sido los primeros en hacer ver el tonelaje de la herencia que reciben una y otro.
Como ajuste de cuentas también ha dado mucho juego en las redes la decepción que, entre quejas y lamentos, siempre confesó sentir la expresidenta regional cuando vio imputados o entre rejas a algunos de los que fueron sus fichajes estrella. Ahora, la que ha salido 'rana' ha sido ella, según el sarcasmo del personal que brujulea en las redes.
Aunque no ha faltado quien, con no poca agudeza, ha establecido comparaciones y llegado a la conclusión de que la maquinaria judicial funciona a distintas velocidades según la autonomía de que se trate y según el color político a investigar. La Andalucía de los casi 40 años del PSOE, sin ir más lejos.