Aclarado por qué Ábalos fue a Barajas de noche y a escondidas: es sonámbulo
Ni España se ha entregado al chavismo ni Ábalos fue al aeropuerto a pactar nada con la enviada de Maduro: fue allí sin querer y dormido. Éste es el relato verdadero.
José Luis Ábalos se reunió en Barajas de noche, sin hacerlo público y en un rincón remoto, con la todopoderosa vicepresidenta de Nicolás Maduro, desatando una tormenta política que pone a España en el ojo del huracán por sus relaciones con el chavismo.
Pero no es lo que parece. Pese a que el secretario de Organización del PSOE y ministro de Transportes ha variado de versión 263 veces en 24 horas, hay una razón que explica ese encuentro furtivo y nada tiene que ver con la sospecha de que el Gobierno de España se ha lanzado definitivamente a las garras de Maduro, Evo Morales y compañía.
Y es ésta, según ha podido confirmar El Pato Cojo en fuentes médicas dignas del mayor descrédito: Ábalos, aunque no ha querido decirlo por pudor, es sonámbulo. Aquella noche, se levantó de a cama en estado de catalepsia y, de manera totalmente involuntaria e inconsciente, llamó a su escolta y a su chófer y les dio instrucciones de llevarlo al aeropuerto de Barajas.
A continuación, e igual de dormido, avisó a las autoridades aeroportuarias de que dejaran un espacio para el aterrizaje del avión de Delcy Rodríguez, le organizó un refrigerio con salmón y cava catalán, subió él mismo a la aeronave y le dio dos ósculos para ella y otros dos para Nicolás Maduro, con las siguientes palabras:
"Dile a Nico que Pedro está con él a muerte, aunque ya sabes que eso puede cambiar y mañana pedir una orden internacional de detención o nombrarle vicepresidente de España".
"No recuerda a Bildu tampoco"
En todo momento Ábalos estuvo dormido, lo que no le impidió firmar autógrafos a unos viajeros de Valencia que le confundieron con Bud Spencer ni desayunar, ya en el regreso, un chocolate y media docena de porras en una churrería próxima a su domicilio.
"Por eso no recuerda nada", insisten en su entorno, pidiendo discreción y comprensión hacia el dirigente socialista. "Su sonambulismo ya le ha hecho vivir otros episodios. Alguna línea del AVE la ha aprobado estando sonámbulo, y no se acuerda tampoco de haber pactado nunca con Bildu, así que no se lo echéis en cara", añaden.