Así explica Javier Negre su salida de El Mundo y desata la tormenta en la redes
Es la gran polémica del día: el despido del responsable de Estado de Alarma en Youtube abre la caja de Pandora y genera un tsunami de mensajes cruzados.
El despido de Javier Negre de El Mundo ha sido el gran TT de las últimas 24 horas en Twitter, donde tanto gustan las broncas, las polémicas y los enfrentamientos a cuchillo. El periodista se ha acostumbrado ya a protagonizar algunas de ellas, ora por su explosivo programa en Youtube, Estado de Alarma; otras por el famoso vídeo de Alfonso Merlos.
Seguramente es, junto a Alvise, el mayor agitador de las redes en tiempos de pandemia, con esa mezcla de denuncias periodísticas y activismo político que les caracteriza, tan del agrado de sus seguidores como denigrado por sus detractores.
Había morbo por conocer la opinión directa del afectado sobre su salida del periódico dirigido por Francisco Rosell en el que destacan otros nombres, también habituales en mil batallas, como Jorge Bustos o Lucía Méndez. Y así lo ha explicado el reportero desde su canal, activo a diario con nombres como Carlos Cuesta, Cristina Seguí o Enrique San Francisco entre tantos otros:
Según Negre, fue él quien pidió el finiquito hace una semana; aunque ha sido El Mundo quien le ha despedido, al parecer sin indemnización y por hacer "competencia desleal" a su departamento audiovisual lanzando productos paralelos en el mismo ámbito en el que desempañaba sus funciones.
Todo eso es falso, asegura, y la razón real son sus críticas a la publicidad institucional que en estos días ha aparecido en la prensa. Que es tan cierto como que no ha afectado a la línea crítica de cabeceras como La Razón, El Mundo o Abc.
Los apoyos de Negre no han dudado en lanzarse en tromba en su defensa, y no son pocos: desde partidos políticos como Vox hasta contertulios como Cristina Seguí, muy implicada en el desarrollo de Estado de Alarma y compañera del periodista en una de sus más llamativas performances, cuando ambos intentaron entregar pasquines de denuncia en la sede del PSOE en Ferraz y en la mismísima Moncloa:
Pero como en Twitter todo tiene dos caras, y ambas son siempre rotundas, el incidente también ha estimulado una reacción opuesta: la celebración del despido y, de paso, el ajuste de cuentas con otros nombres que para los detractores de Negre forman parte del mismo equipo: desde Alfonso Merlos, sumido en un calvario desde el famoso vídeo con Alexia Rivas; hasta Ana Rosa Quintana:
Y hay quien ve en todo una campaña global contra determinados periodistas, caso de uno de los miembros del equipo de comunicación de VOX en el Congreso, autor del tuit donde se difunde una lista de supuestos purgados: