Anabel Alonso se hunde con una fake que relaciona a la Policía con los nazis
La actriz cómica se lleva un rapapolvo viral tras denunciar la complicidad de la Policía Nacional con la manifestación nazi de Madrid con una foto que era de Barcelona.
Hace no tanto, Anabel Alonso hacía reír de felicidad con sus monólogos, sus papeles en series muy conocidas y su evidente vis cómica en todo tipo de formatos en televisión, cine o teatro. Ahora hace llorar de pena con sus frecuentes meteduras de pata en las redes sociales, marcadas siempre por un sectarismo ideológico que ya ni se preocupa en disimular.
El último ejemplo le ha hecho llevarse un rapapolvo viral histórico, tras difundir una lamentable fake news que pretendía revelar la supuesta complicidad de la Policía Nacional con los manifestantes de la concentración nazi del sábado en Madrid, inauditamente consentida por la Delegación del Gobierno en el mismo día, vaya casualidad, en que el PSOE sufría un enorme desgaste por mirar para otro lado con los akelarres abertzale en homenaje al etarra Parot:
Del mismo modo que muchos políticos se lanzaron a degüello contra PP y VOX, acusándoles de incentivar la homofobia mientras ambos partidos repudiaban la repugnante -y residual- manifestación nazi; la cómica sin gracia se lanzó a la yugular de la Policía, intentando vender una conexión inexistente con los cenutrios que, a estas alturas, aún siguen creyendo que Hitler fue algo más que un cruel genocida. Y para comenzar el varapalo a Alonso, nadie mejor que el autor de la foto que ella utilizó para lanzar su bulo:
La mofa general se convirtió en indignación de los representantes de los Cuerpos de Seguridad, hartos de que desde determinadas trincheras ideológicas se les señale con tanta frivolidad, manipulando imágenes que, puestos a hacer el ridículo, podría hacerse con cualquier dirigente político español también, como demuestra este otro tuit irónico:
No contenta con tan abrumadora metedura de pata, la actriz fichada por Risto Mejide para ejercer de analista en Todo es Mentira, defendió su postura con el archiconocido "no es lo que parece", sin disculparse ni rectificar, ganándose la contundente respuesta de los propios policías:
En fin, que hay gente que se juzga sola: basta con dejarles hablar, que ellos mismos se retratan. A ver cuánto tarda la pobre Anabel en tildar de "erupción fascista" el preocupante episodio volcánico en La Palma o en denunciar que esa lava, tan machista ella, afecta más a las mujeres que a los hombres. Con ella, nunca hay que descartar nada. Menos que acierte.