Indignación total con Pepe Álvarez (UGT) por "celebrar" los malos datos de paro

Este jueves, el Instituto Nacional de Estadística ha publicado los datos de paro de la EPA, la Encuesta de Población Activa, con unos resultados terribles que reflejan la inoperancia e ineptitud del Gobierno de coalición, en especial de la titular de Trabajo, Yolanda Díaz, que siempre ha vendido que su reforma laboral era “el Santo Grial” de la clase trabajadora.

Pues los datos destrozan esa propaganda: el paro ha subido hasta 12,67%, siendo el peor dato de desempleo en un tercer trimestre, justo después de la época veraniega, en los últimos diez años. Y con estos datos, muchas personas pensarán que los sindicatos españoles saltarían a la palestra para condenar las actuaciones políticas del Gobierno y exigir responsabilidades. Pero nada más lejos de la realidad.

A las pocas horas de conocerse estos lamentables datos, el líder sindical de UGT, Pepe Álvarez, ha salido en Televisión Española a “celebrar” el paro español. Porque es paro del PSOE, hermano mayor de dicho sindicato, el cual recibe millonarias subvenciones anuales para hacer lo suyo, que es callar, obedecer, mantener contenta a la calle y no protestar nunca.

Textualmente, Álvarez ha señalado que “los datos de desempleo son volátiles”, restando importancia a las cifras y dándole una patada al balón desentendiéndose del tema. “Cada día nos dicen una cosa”, apuntó Álvarez, el mismo que en julio pedía que no molestaran a los trabajadores justo antes de irse de vacaciones. Que ya veríamos en septiembre y octubre qué sería de España.

Pues ya estamos en octubre y muchos trabajadores que por entonces no debían preocuparse por los malos datos económicos según UGT, ahora han sido despedidos. ¿Quién defiende sus intereses? ¿Los sindicatos mayoritarios como el de Álvarez? La respuesta es un rotundo no.

Pero hay más. Álvarez, haciendo gala de su desconocimiento económico, ha culpado de la crisis no al Gobierno, sino a los que denuncian que los pésimos datos de empleo, son, efectivamente, pésimos: “A mi me parece que hay que coger los datos con precaución y no generar más drama del que ya tenemos. Las crisis vienen también en condición de las situaciones que se generan”. Llamar a las cosas por su nombre, para Pepe, es una mala noticia. Y tan tranquilo que se queda.