Ayuso “destroza” el sanchismo y su exigencia resuena en Moncloa
La presidenta madrileña ha lanzando un contundente mensaje a Moncloa después de los ataques vividos estas semanas por el Gobierno a los órganos judiciales: “Bolaños debe dimitir”
La supresión del pleno del Senado este jueves que pretendía votar la reforma del sistema de elección de los magistrados del Tribunal Constitucional “por la puerta de atrás”, ha sentado como un jarro de agua fría en el Gobierno. Hasta el punto de que los ministros socialistas han salido en masa este martes ha condenar la actuación del TC amenazando al órgano con que “volverán” a legislar para tumbar las mayorías actuales.
Un hecho histórico que la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, ha salido a valorar también con una indignación supina. “Yo creo que después de lo visto esta madrugada y las declaraciones del presidente del Gobierno, que dimitiría al ministro de la Presidencia, Félix Bolaños”, ha espetado Ayuso, en referencia a las declaraciones de Bolaños esta madrugada asegurando que el TC quedaba deslegitimado “para siempre” tras su decisión.
“Es una patada hacia adelante para enfrentar al parlamento y la Justicia. Para volver a decir que hay que elegir entre la democracia y los jueces. Algo que hemos visto en otros países cuyos ciudadanos han abandonado ese territorio para venir aquí y encontrarse con la misma lacra”, ha espetado la presidenta popular, dejando patente su enfado y denunciando los futuros planes socialistas.
“Nosotros siempre defenderemos la separación de poderes, la libertad y el estado de derecho, que es lo único que le queda a los ciudadanos cuando los proyectos totalitarios cogen fuerza”, ha zanjado la presidenta, lo que ha provocado numerosas palabras de halago de seguidores en redes sociales.
Una defensa férrea de los valores constitucionales que Sánchez se empeña en manchar o, directamente, desechar. Porque lo vivido estas últimas semanas tiene un carácter autárquico nunca antes visto. Y si alguien se pone en el camino del “sanchismo”, este martes hemos podido contemplar cómo el Gobierno en tromba sale a “jurar venganza”. De momento, la democracia ha ganado. Y no gracias al Gobierno, sino a la justicia y a la separación de poderes.